El Gobierno pondrá más controles en las carreteras para reducir la velocidad el 5%

El Gobierno catalán aumentará los controles de velocidad en las carreteras con el objetivo de que a finales del verano la velocidad media de circulación en Cataluña descienda al menos el 5%. De conseguirse, la velocidad media pasaría de los 98 kilómetros por hora actuales, según la estimación del Ejecutivo, a 93 kilómetros por hora, un objetivo que el propio conseller en cap, el republicano Josep Bargalló, calificó de "muy osado", pero necesario para reducir los accidentes mortales. De acuerdo con datos oficiales, el número de muertos en las carreteras se ha reducido casi el 19% en el primer semestre del año.

La reducción del 5% de la velocidad media es uno de los grandes objetivos que el Gobierno de Pasqual Maragall se ha fijado en el plan de actuaciones para el verano que ayer debatió el Consell Executiu. La disminución de accidentes de tráfico se ha convertido en una prioridad del Ejecutivo, que la vincula muy directamente a la reducción de la velocidad media.

Los estudios de que dispone el Servicio Catalán de Tráfico, de acuerdo con investigaciones similares en Europa, establecen una asociación muy clara entre exceso de velocidad y muertes en la carretera. Estos estudios señalan que disminuir la velocidad media nueve kilómetros por hora tendría como consecuencia la reducción a la mitad del número de muertos en la carretera y una disminución de un tercio en los heridos graves.

En 2003, hubo 452 accidentes mortales en las carreteras catalanas, que causaron 512 muertos y 253 heridos graves. Los datos del primer semestre de 2004, que están a punto de cerrarse, muestran una tendencia mejor: hasta el 28 de junio, señalan datos oficiales, los accidentes mortales fueron 171 y el número de fallecidos, 196, un descenso del 18,7% con respecto al primer semestre de 2003.

Ante la rotundidad de los estudios y las elevadas cifras de accidentes en las carreteras el Gobierno catalán incrementará los controles de velocidad, aunque pueda provocar el descontento de algunos conductores. El plan del Ejecutivo prevé que el Servicio Catalán de Tráfico cederá esta misma semana 18 radares dinámicos a distintas policías locales, mientras que los Mossos d'Esquadra dispondrán para la campaña del verano de otros 24 radares dinámicos. Además, habrá otros nueve radares fijos en distintos puntos de Cataluña.

Bargalló explicó que sólo es posible alcanzar los 98 kilómetros por hora de velocidad con el incumplimiento reiterado de las velocidades máximas permitidas, por lo que dejó claro que el Ejecutivo aumentará los controles. El conseller en cap aseguró que la reducción de los cinco kilómetros por hora de media que persiguen serviría "para garantizar mucho más la seguridad", pero que ésta aún debería rebajarse más en el futuro. "Al final del verano haremos una evaluación", concluyó.

El plan para el verano del Ejecutivo recoge todos los programas para hacer frente a posibles emergencias. Entre ellas tienen un lugar preeminente las medidas de prevención de incendios -ya presentadas en el Parlament- y para hacer frente a una eventual ola de calor.

Bargalló afirmó que el Gobierno pondrá este verano su máximo empeño en cobrar a los países de la Unión Europea la factura sanitaria de los turistas procedentes de estos países. El conseller en cap quiso añadir que también dispondrán de datos sobre el gasto sanitario derivado de atender a turistas de otras comunidades autónomas, aunque por ahora, aclaró, no tienen intención de presentar estas facturas.

El documento difundido ayer de medidas gubernamentales para el verano es tan exhaustivo que en sus ocho folios se incluye incluso que la Secretaría de Política Lingüística pondrá un anuncio de prensa sobre los estrenos de películas en catalán y que participará en dos conferencias en la Universitat Catalana d'Estiu.