Dos jóvenes heridos en el tiroteo a un autobús que procedía de una discoteca en Castellón

El autobús iba lleno de jóvenes que regresaban a Castellón después de haber pasado una noche de marcha en la macrodiscoteca Pirámide, situada en Cabanes, a unos 27 kilómetros de la capital, cuando fue alcanzado al menos por un disparo a mitad de camino, a la altura de la localidad de Borriol. Dos jóvenes resultaron heridos leves. El autor de la agresión, ya identificado, huyó en un turismo con otras personas. Su origen podría estar en una discusión previa en la discoteca.

Dos jóvenes resultaron heridos ayer cuando fue tiroteado el autobús en el que viajaban de regreso de una macrodiscoteca a Castellón, alrededor de las ocho de la mañana. Ambos sufrieron lesiones de escasa gravedad, causadas al ser alcanzados por los cristales de una ventanilla que recibió el impacto de una bala, disparada por un arma corta, cuyas características no habían sido hechas públicas al cierre de esta edición.

La Guardia Civil identificó horas después al autor material de al menos un disparo, así como a los ocupantes del turismo en el que huyó. Una discusión en el interior de la discoteca entablada entre varios jóvenes y motivada, según los primeros datos, por celos se baraja como la principal hipótesis del origen del tiroteo.

El suceso ocurrió a las 8.15 horas, en el kilómetro 5,400 de la CV-10, que une los municipios de Castellón y Cabanes, donde se encuentra la macrodiscoteca Pirámide.

El establecimiento ofrece cada fin de semana un servicio de autobús que cubre, con más de media docena de rutas, el trayecto hasta distintas localidades de las provincias de Castellón, Valencia y Tarragona.

El último de los viajes del que se conoce como el autobús de la marcha tiene la salida prevista a las ocho de la mañana.

Pocos kilómetros después de iniciar su ruta, en el término municipal de Borriol, el autobús sufrió el impacto de un disparo procedente de un grupo de jóvenes que se encontraba junto a varios turismos estacionados en el arcén de la autovía. Según fuentes de la Guardia Civil, uno de ellos efectuó al menos un tiro sobre el autobús y la bala alcanzó una de las ventanillas laterales de la parte trasera.

A consecuencia del disparo resultaron heridos dos jóvenes de 18 y 19 años de edad, vecinos de la localidad castellonense de Burriana, que sufrieron lesiones provocadas por los cristales de la ventanilla.

Esperaban en una rotonda

La bala, según las mismas fuentes, alcanzó la parte superior del autobús pero no llegó a afectar a ninguno de sus ocupantes. Segundos después, el presunto autor del disparo huyó en compañía de otras dos personas en un Opel Astra negro.

Esa forma de actuar indicaría, según fuentes de la investigación, que el grupo esperaba el paso del autobús en una de las rotondas de la carretera para perpetrar el ataque con mayor precisión.

El autobús viajaba detrás de otro vehículo que realizaba el mismo servicio para la discoteca. Tras producirse al suceso, se vivieron momentos de pánico y nerviosismo entre la multitud de jóvenes que realizaba la ruta de regreso.

Una vez tomada declaración a algunos de los afectados y a decenas de ocupantes del autobús, la Guardia Civil baraja la hipótesis de que una discusión iniciada en el interior de la discoteca motivada por celes está en el origen de la agresión al autobús.

De hecho, varios testigos presenciales identificaron a los jóvenes que se encontraban en el arcén en el interior del vehículo y declararon que les habían visto momentos antes en el interior del local de ocio del que procedía el autobús, la macrodiscoteca Pirámide.

Uno de los heridos en el tiroteo del autobús fue dado de alta en la misma mañana de ayer mientras que el otro permanece ingresado en el hospital General de Castellón, aunque no se teme por su vida.

Al cierre de esta edición, los agentes de la policía judicial de la Guardia Civil mantenían en marcha un dispositivo para conseguir la localización del presunto autor del disparo y de sus acompañantes para proceder a su detención.