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FÓRUM DE BARCELONA | Observatorio
Columna
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La cultura de modificar el cuerpo

Tatuarse, clavarse objectos punzantes en el cuerpo o peinarse o vestirse de una forma considerada escandalosa pueden ser modos de ex- presar el rechazo a un determinado modelo de sociedad. También son maneras de destacar la propia belleza, según los cánones del momento, o de someterse a la presión insoportable de la cultura y a las atávicas costumbres de la tribu. Hay mucho que observar y que aprender, sobre todo esto en Mírame. La cultura de modificar el cuerpo, un breve, curioso y sorprendente paseo por el uso ancestral universal del tatuaje, el piercing, la escarificación y otras formas de modificar la huella que la naturaleza imprime sobre cada persona humana.

Algunas exposiciones del Fórum (ésta, una de ellas) son como degustaciones de lo que bien pudiera haber sido un banquete. A menudo está ahí precisamente su gracia. Y lamento que muchas personas se vayan a perder todo eso simplemente porque han llegado a la conclusión prematura de que no debían ir al Fórum. Éste es el resultado más negativo de las críticas al evento, que comparto en algún punto: pocas veces Barcelona ha tenido una oferta cultural tan rica, plural y sugerente como en estos cinco meses de 2004. Nadie debería perderse el Fórum, y para fomentar la presencia masiva de la ciudadanía habría que tener la valentía de abrir el recinto, liberarlo de vallas y dejar entrar a todos. Se podría poner un precio módico, casi simbólico, a las exposiciones y espectáculos en recintos cerrados. Tengo para mí que se produciría una invasión del espacio y se recaudaría más o menos la misma cantidad de dinero.

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