Un profesional sobre ruedas

Santiago Sanz Quinto, de 23 años, natural de Albatera, en Alicante, viajó ayer en avión hacia Toronto, Canadá, para participar en las America's Series de atletismo, una competición que durante 17 días unifica varias reuniones en un gran torneo. Sanz se marchó solo, siendo como es el único deportista español que tomará parte en las pruebas. Pero eso no es lo más destacado. Su peculiaridad radica en que Santiago, que posee también el título de entrenador nacional de atletismo, sufre desde los 18 meses de vida una enfermedad neuromuscular que le ha provocado una atrofia en los brazos y las piernas.

Santiago compite en una silla de ruedas especial. Su interés por el deporte es tal que este alicantino es el primer español que se dedica profesionalmente al atletismo en silla de ruedas. También el mallorquín Xavi Torres y el vasco Javi Conde poseen como única ocupación el deporte profesional, pero en sus casos sus discapacidades no les obligan a hacerlo en una silla de ruedas. El primero se dedica a la natación y el segundo al atletismo.

"Vivo por y para el entrenamiento. Mi sueño es que mi vida como atleta dure muchos años", asegura Santiago Sanz. "El deporte es mi medio de vida. Un día normal es un día de deporte, de entrenarme por la mañana y por la tarde, y viajar de un lado a otro. Soy un privilegiado. Esto empezó como una afición y ahora es mi trabajo", añade. Todo comenzó, en efecto, cuando con 13 años se aficionó al atletismo, aunque no tenía el material específico para practicarlo. Poco a poco, el caminito que empezó se ha convertido en una autopista. Tanto que es un participante habitual en los Campeonatos de Europa y del mundo, y ha competido en lugares tan dispares como Zúrich, Seattle y Sidney, y en su agenda inmediata esperan Atlanta y Nueva York.

Sanz participó en los Juegos Paralímpicos de Sidney, en 2000, en los que consiguió la medalla de plata en la carrera de los 5.000 metros y el bronce en los 800. El 16 de mayo pasado, en el Campeonato de España de Atletismo para Minusválidos Físicos que se celebró en Gavà, Barcelona, consiguió la mejor marca mundial en la historia de los 5.000 (13 minutos, 6 segundos y 96 centésimas).

En septiembre se licenció en Educación Física e inmediatamente se pasó al profesionalismo. Dentro de tres meses tomará parte en sus segundos Juegos Paralímpicos, en Atenas, donde defenderá su excelente reputación. A los metales olímpicos suma la medalla de oro en el Campeonato de Europa de Lucerna, Suiza, en 2001, en las categorías de 800, 1.500 y 5.000 metros.

Sus resultados y su repercusión le han llevado a conseguir un acuerdo de patrocinio con el Ayuntamiento de Albatera, que le subvenciona con 18.000 euros anuales para ser profesional. Otra parte de su presupuesto, unos 36.000 euros, lo aporta una empresa de maquinaria industrial alicantina, mientras que una marca de ropa deportiva se encarga de su equipación.

Sanz trabaja también con el asesoramiento de Gabriel Brizuela, profesor de Biomecánica en la Universidad de Valencia, y que ha colaborado con deportistas como Niurka Montalvo y Yago Lamela. Y no es extraño que durante temporadas viaje al Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada para el entrenamiento en altura. Todo con el objetivo de estar al máximo nivel para los Juegos de Atenas, a los que acudirán otros 15 deportistas de la Comunidad Valenciana.

Un sueño que estuvo a punto de romperse el pasado miércoles, cuando recibió un golpe fortísimo contra un coche en un accidente de circulación. Por suerte, sólo sufrió contusiones en un hombro y en un codo. Su silla de ruedas quedó destrozada, no así sus ganas de seguir corriendo. Hacia Atenas.