El enlace con la economía
Los secretarios generales de los dos principales sindicatos acudieron a la boda junto a representantes de las grandes empresas, la banca e instituciones económicas nacionales e internacionales
La gran empresa, la gran banca y las grandes cajas, las grandes constructoras y las grandes eléctricas, los grandes almacenes, la gran patronal y los grandes sindicatos, también instituciones del ámbito económico y organismos internacionales, ilustres despachos de abogados, algunas ausencias... La economía, en fin, en perfecto estado de revista. Fueron llegando mezclados con los otros mundos (el de la política, el de las letras, el del deporte, el de la aristocracia...) y ocupando sus sitios. Todos con los recomendados chaqués, con la excepción de los dos representantes de los trabajadores, Cándido Méndez, secretario general de la UGT, y José María Fidalgo, de CC OO, que, previa consulta a la Casa del Rey, acudieron con respetuoso traje oscuro.
Allí estaban los dos en la última fila de la nave central de la catedral, justo detrás del tantas veces compañero de discusiones José María Cuevas, presidente de la CEOE, y de José Manuel Fernández Norniella, presidente de las Cámaras de Comercio. Jaime Montalvo, presidente del Consejo Económico y Social, llegó y se sentó junto a su tocayo, el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana.
El flamante director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y ex vicepresidente, Rodrigo Rato, acudió solo y pudo compartir impresiones (sobre la boda y sobre la economía internacional) con el que será vecino suyo en Washington, James Wolfenshon, presidente del Banco Mundial, y con el uruguayo-asturiano Enrique Iglesias, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con los que compartió bancada.
Repartidos entre los asistentes, los banqueros Emilio Botín y Francisco González, presidentes de los bancos Santander y BBVA; Javier Valls Taberner, copresidente del Popular, y Ana Patricia Botín, presidenta de Banesto; Ricard Fornesa, presidente de La Caixa, y Miguel Blesa, de Caja Madrid; José Luis Leal, presidente de la patronal bancaria; Juan Ramón Quintás, de la Confederación de las Cajas de Ahorros, y Josep Vilarasau.
El ramillete de empresarios selectos continuaba con César Alierta, presidente de Telefónica; Alfonso Cortina, de Repsol-YPF; Carlos Pérez de Bricio, de Cepsa; Isidoro Álvarez, de El Corte Inglés; Juan Abelló, presidente de Torreal, y Alberto Alcocer.
También acudieron los constructores Florentino Pérez, presidente de ACS y del Real Madrid; el matrimonio formado por Esther Koplowitz y Fernando Falcó, que está al frente de FCC; Rafael del Pino Calvo-Sotelo, presidente de Ferrovial, y Juan Miguel Villar Mir, presidente de OHL.
También los eléctricos Manuel Pizarro, presidente de Endesa, e Íñigo de Oriol, de Iberdrola, y el presidente de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), Miguel Carballeda. Y empresarios muy cercanos a los veranos regios como José Cusí, Mariano Puig, Gabriel Escarrer o Juan March. Y los abogados mercantilistas, que tantos negocios han fraguado, Rodrigo Uría y Antonio Garrigues.
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