El PSOE prepara su 10º congreso "en un escenario de tranquilidad", dice Pizarro

El PSOE de Andalucía celebrará los días 15, 16 y 17 de julio en Granada su 10º congreso regional, bajo un escenario político caracterizado por la cohesión interna y la satisfacción por los resultados electorales, y en el que no se prevén novedades destacadas en la composición de la nueva dirección, en la que Manuel Chaves volverá a optar a la secretaría general.

Al congreso asistirán un total de 559 delegados, de los que 525 serán elegidos en congresos provinciales extraordinarios, en los que además se designarán los representantes de las ocho provincias andaluzas que acudirán al congreso federal previsto para el primer fin de semana de julio, mientras que los otros 34 serán representantes de las Juventudes Socialistas y de las distintas organizaciones sectoriales.

El secretario de Organización del PSOE, Luis Pizarro, reconoció ayer que el congreso regional se va a celebrar "en un escenario de tranquilidad y cohesión interna, aunque no estará exento de debate", dada la "larga tradición democrática" de su partido.

Pizarro continuará casi con toda seguridad al frente de la secretaría de Organización, cargo en el que lleva 10 años, aunque no quiso pronunciarse explícitamente. Sí dijo no faltarle "ganas" y tener

"muchísima ilusión por seguir trabajando".

El actual secretario general del PSOE de Andalucía, Manuel Chaves, desveló hace ya meses su deseo de continuar al frente del partido, por lo que la única duda es si en el organigrama se mantendrá la vicesecretaría, cargo que desde el último congreso ha ocupado Mar Moreno hasta que fue elegida presidenta del Parlamento de Andalucía. El responsable de Organización insistió en que ningún congreso del PSOE es "de trámite", pero admitió que "el escenario que tenemos es el que tenemos", en alusión a los "contundentes" resultados electorales del 14-M, cuando el PSOE logró la mayoría absoluta en Andalucía.

Respecto a la ponencia marco del congreso, Pizarro adelantó que tendrá como ejes principales el proyecto de la segunda modernización de Andalucía y la reforma del Estatuto de Autonomía. Los socialistas harán una propuesta de reforma "valiente", según Pizarro, ya que apuestan por lograr el "máximo techo competencial" que permita la Constitución.

Otra de las preocupaciones del PSOE es que los ciudadanos le visualicen como una organización "con voz propia". "Hemos aprendido de los errores y, cuando ha habido un exceso de institucionalización del partido, lo hemos pagado", admitió Pizarro.