Una avería obliga a un avión a regresar a Barajas

Un Boeing 757 de la compañía Iberia, con 181 pasajeros a bordo y destino a Roma, se vio obligado a regresar al aeropuerto de Barajas a las 12.55 de ayer, una hora después del despegue, por una avería en uno de los motores de la aeronave.

Según la versión ofrecida por Iberia, el comandante del aparato detectó "fluctuaciones en uno de los motores". El avión tomó tierra con "total normalidad" después de que el aeropuerto activara la alerta local y sin que fuera necesaria la intervención de los bomberos, equipos sanitarios y demás colectivos que son movilizados en este tipo de situaciones.

La alerta local es la más baja de los tres niveles de emergencia aeroportuaria.

El vuelo 3608 de Iberia despegó desde Madrid a su hora prevista, las 11.55, y unos 30 minutos después, el piloto observó "vibraciones" en uno de los motores, lo que le hizo sospechar que el propulsor pudiera sufrir una avería grave.

El piloto decidió entonces regresar a Barajas, ya que Iberia tiene en el aeropuerto madrileño la base central de mantenimiento.

Tras el aterrizaje, los 181 pasajeros y sus equipajes fueron trasladados a otra aeronave desde la que, según informaron fuentes de la compañía, despegaron a primera hora de la tarde hacia la capital italiana.

Fuentes de la compañía explicaron que el vuelo transcurrió con "total tranquilidad", incluso cuando los pasajeros fueron informados por el propio comandante de la nave del motivo del regreso.