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La asamblea del PNV en Vizcaya permite al candidato de Imaz optar a la reelección

La Asamblea Regional de Vizcaya dio anoche luz verde por abrumadora mayoría a que el candidato de Josu Jon Imaz a la presidencia de la ejecutiva vizcaína, Iñigo Urkullu, pueda ser elegido para el cargo. Por la tarde, el Tribunal Nacional de Justicia del PNV le había declarado no elegible al estimar que le afecta la limitación de los dos mandatos consecutivos que establecen los estatutos del partido para los cargos internos.

La Asamblea le liberó de esa limitación por 158 votos a favor, cinco en contra y cinco abstenciones, según fuentes oficiales de la Ejecutiva vizcaína, para permitirle que siga adelante en la liza. El proceso electoral fue suspendido cautelarmente el pasado miércoles por la Comisión de Garantías y Control del partido, después de que el Tribunal Nacional interno admitiera la víspera la denuncia de tres afiliados afines al otro contendiente, el alcalde de Getxo, Iñaki Zarraoa, alineado con el sector de Joseba Egibar y Xabier Arzalluz. La Asamblea decidió además que el proceso electoral se reinicie en el mismo momento en donde se paralizó. En las asambleas celebradas el lunes, martes y miércoles, en la segunda vuelta, la candidatura de Urkullu había barrido a la de su oponente.

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Aunque la decisión de la asamblea vizcaína es suficiente, según admite el propio tribunal en su auto, para levantar la inelegibilidad de Urkullu, se ha convocado para hoy una reunión extraordinaria de la Asamblea Nacional, el máximo órgano del PNV, con el fin de "tener informado" a este órgano. Esta convocatoria revela el grado de malestar existente en el sector de Imaz por lo que se consideran maniobras obstruccionistas del otro bando en Vizcaya, la organización más importante del PNV al concentrar a más del 70% de la afiliación del partido.

Limitación de mandatos

El artículo 111 de los estatutos del PNV, introducido en enero de 2000, establece que "la reelección de los cargos internos sólo podrá efectuarse por una sola vez, debiendo transcurrir un mandato para poder acceder a una nueva elección". Sin embargo, esta limitación puede ser levantada por la asamblea competente "de manera expresa e individualizada".

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Urkullu entró en 1996 como miembro de la ejecutiva de Vizcaya y en 2000 pasó a presidirla, por lo que, aparentemente, sería inelegible para un nuevo mandato. Sin embargo, la disposición transitoria primera de los estatutos de 2000 indica que las restricciones de derechos de los afiliados incluidas en ellos sólo tendrán efecto a partir de su aprobación y ratificación, "sin que se tengan en cuenta circunstancias anteriores a aquéllas". Durante el también conflictivo proceso de sucesión de Arzalluz, ganado de forma apurada por Imaz frente a Egibar, las actuaciones del tribunal interno fueron controvertidas. Se considera que la mayoría de sus miembros (sólo uno fue renovado en la última Asamblea Nacional) son afines al sector de Arzalluz y Egibar.

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