A los 75 años es saludable el parapente
La artesana colombiana Ana Carlota Rozo, de 75 años, vuela en parapente en las montañas próximas a Bogotá desde que uno de sus nietos le obsequió un vuelo en el Día de la Madre, informó el diario Bogotano El Tiempo. Según el rotativo, la "abuela voladora" jugaba al dominó y al tejo, un juego típico consistente en lanzar una esfera metálica a un tablero para hacer estallar papeletas de pólvora, pero se aficionó al parapente por recomendación de uno de sus nietos. Rozo, viuda desde hace 17 años, madre de 11 hijos y abuela de 25 nietos, se lanza desde el cerro El Paraíso de Sopó, una localidad andina situada a 30 kilómetros de Bogotá, desde que su nieto Miguel la invitó a conocer esta afición. La veterana aficionada a este deporte de riesgo comentó que no le "duele la espalda, ni los huesos. No camino con bastón ni sufro de reumatismo y tampoco se me sube la tensión". "Creo que la única enfermedad que tengo es fiebre por volar muy alto", agregó la artesana, que también asiste a clases de danza todos los días. Su nieto Miguel señaló que aprendió a volar ayudando a los aficionados que llegaban a la zona los fines de semana, y uno de ellos, un francés, en agradecimiento, le regaló su parapente.-
