La UEFA sanciona a Roberto Carlos con dos partidos por agredir a Demichelis

Roberto Carlos fue sancionado ayer por la Comisión Disciplinaria de la UEFA con dos partidos de suspensión en la Liga de Campeones. La decisión del órgano jurídico fue adoptada tras investigar de oficio lo que considera una "agresión" del defensa del Madrid a Demichelis, central del Bayern, durante el partido de ida de los octavos de final de ese torneo, disputado en Múnich la semana pasada. El Madrid tiene de plazo hasta el jueves para recurrir ante el Comité de Apelación del organismo europeo por considerar "peligroso" y "desproporcionado" el castigo.

El juicio sobre circunstancias no apreciadas por los árbitros mediante la prueba del vídeo tiene numerosos precedentes en los organismos judiciales de la UEFA, así como en las diferentes Ligas europeas, incluyendo la española. La suerte de Roberto Carlos en el tribunal de la UEFA no fue peor que la de Nedved, sancionado con tres partidos de suspensión en abril de 2001 por una entrada fuerte a un jugador del Leeds; o la de José Ignacio, del Celta, que recibió una pena de tres partidos en septiembre de 2003 por otra patada; o la de Mihailovic, castigado con siete encuentros en noviembre de 2003 por lanzar un escupitajo al rival, entre otros.

La delegación madridista que acudió a la sede de la UEFA, en Nyón, se llevó, sin embargo, un chasco. "No esperábamos que hubiera sanción", reconoció Emilio Butragueño, adjunto a la dirección deportiva; "así que dos partidos nos parecen algo desproporcionado si se analiza el contexto de la jugada. Por un lado, Demichelis le hace una entrada muy dura que no se sanciona. En segundo lugar, el hecho no se contiene en el acta arbitral. Por último, todos conocen a Roberto Carlos en el mundo del fútbol. Es un jugador ejemplar por su deportividad; siempre sonríe y colabora con el árbitro".

"Han considerado que Roberto Carlos tiene una reacción violenta", explicó Butragueño; "pero le han sancionado con dos partidos y no con tres porque consideran la entrada de Demichelis como un atenuante, como una provocación".

Butragueño acudió a Nyón acompañado por José Luis López Serrano, director de relaciones internacionales del Madrid, y Antonio Vázquez, director de los servicios jurídicos del club. "Ahora tenemos hasta el jueves para presentar un recurso", apuntó Butragueño, que entiende que la UEFA ha sentado con el de ayer un precedente "peligroso". "Por este camino", dijo, "la UEFA abre el camino a que los clubes presenten vídeos pidiendo sanciones o pidiendo rearbitrar situaciones que el árbitro no ha podido ver".

Si la resolución se confirma, Roberto Carlos se perderá el encuentro de vuelta contra el Bayern, en el Bernabéu, y el de ida de los cuartos de final en el caso de que el Madrid pase la eliminatoria.

El brasileño fue objeto de una dura entrada por parte del central argentino Demichelis, que actuaba en el medio campo. Al sentirse agredido, desde el suelo y con Demichelis de hinojos a su espalda, Roberto Carlos se tomó la justicia por su mano y le lanzó un puñetazo de revés. El árbitro, el noruego Terje Hauge, no lo vio porque Beckham le tapó el ángulo, pero las cámaras de televisión -50 cadenas retransmitían el partido en directo- registraron el gesto y lo reiteraron para satisfacción de los espectadores alemanes.

Al conocer la sanción, Demichelis fue breve: "En Argentina no se usan los vídeos para castigar. Prefiero mantenerme al margen".

En Argentina no se estila, pero en Europa ya es costumbre extendida irrumpir en los partidos y juzgar, de oficio, no la cosa juzgada por los árbitros, sino aquellas circunstancias que el árbitro no detectó y que revisten especial gravedad: actos racistas, agresiones...

La prueba del vídeo en la actuación de oficio es un instrumento de uso excepcional que el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol argumentó en su sanción a Kluivert con cinco partidos. Kluivert agredió a Cota sin que lo viera el árbitro durante el partido Rayo-Barcelona, disputado en Vallecas en 1999.

"Como regla", dice este Comité en sus fundamentos de Derecho, "las actuaciones de oficio relativas a conductas no descritas en el acta arbitral se referirán exclusivamente a (...) infracciones graves o muy graves, aunque no sólo por la entidad de la conducta en sí misma considerada, sino también porque su notoriedad, por ejemplo, al haberse producido en un encuentro retransmitido en directo, haya amplificado su incidencia en el buen orden deportivo, que, en último extremo, constituye el bien jurídico protegido por el ordenamiento disciplinario".

De ahí el supuesto extraordinario de la "alarma social" que decía el ex presidente del mencionado comité Fernando Sequeira para justificar su intervención de oficio.