El 10% de los viajeros de FGC no pagan o pagan menos de lo que debieran

Una de cada 10 personas viaja en los Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) echándole morro al asunto. O no pagan o pagan menos de los que debieran. Este segundo tipo de fraude se da entre pasajeros que necesitan un billete para dos o más coronas tarifarias pero que utilizan para entrar en las instalaciones un abono o billete que sólo da derecho a un trayecto más corto. La empresa ferroviaria dependiente del Gobierno catalán ha realizado un análisis pormenorizado del fraude y ha llegado a diversas conclusiones. El fraude real es del 7% en la línea del Vallès y del 6,3% en la del Baix Llobregat. Pero a estos porcentajes hay que añadir el fraude probable, no descubierto directamente pero localizado mediante cálculos, que en la línea del Vallès es del 3,4% y en la de Baix Llobregat asciende al 2,9%.

Los defraudadores se reparten casi por igual entre quienes entran sin pagar y quienes pagan una tarifa inferior a la que les correspondería por el trayecto que realmente realizan.

En la línea del Vallès, las estaciones en las que se registra mayor fraude son las de la plaza de Catalunya y Provença, seguidas de la de Sarrià. En los tres casos se trata de usuarios que no utilizan el billete. En cambio, en las estaciones de Sant Cugat, Rubí, Terrassa y Sabadell-Rambla la mayoría de los defraudadores utilizan un billete que es inadecuado. La estación donde se produce un mayor porcentaje de fraude es, sin embargo, la de Universitat Autònoma. Los que no pagan suponen el 12,1%, y los que usan un billete de precio inferior, el 8,4%.

En la línea del Baix Llobregat, con sus prolongaciones hacia Anoia, las estaciones con mayor porcentaje de fraude son Sant Boi, L'Hospitalet, Ildefons Cerdà y Espanya. Los viajeros con billete incorrecto se localizan, sobre todo, en Martorell, Sant Andreu de la Barca, Olesa, Piera, Manresa e Igualada.

Perfil del defraudador

Los hombres defraudan más que las mujeres. El análisis de los casos de fraude descubiertos señala que es mayor entre los varones (el 8% de los usuarios) que entre las mujeres (6%). Por edades, el fraude lo cometen en mayor medida los menores de 20 años y los mayores de 60, aunque con ligeras diferencias. En la línea del Vallès, son más los defraudadores jóvenes

que los que superan los 60 años; estas proporciones se invierten en la línea del Baix Llobregat. En la línea del Vallès la mayor parte del fraude se produce antes de las nueve de la mañana, y en la otra, la franja con más defraudadores es la que va de las nueve a las doce de la mañana.