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Sole Giménez ultima un álbum con versiones de sus canciones favoritas

¿Qué tienen en común Marvin Gaye, Björk, Radio Futura, Golpes Bajos, Eric Clapton, Edith Piaf y Piratas? Cuando menos, el hecho de servir a Sole Giménez, cantante de Presuntos Implicados, para confeccionar su primer álbum en solitario. El disco, grabado íntegramente en Valencia, saldrá al mercado a finales de febrero y llevará por título Ojalá, que así se llama la única canción del álbum -un tema del grupo portugués Madredeus- que ha sido traducida para la ocasión. Sole Giménez califica su primer álbum en solitario como un "capricho" que se ha dado a sí misma y también como "un ejercicio de estilo". Ya en el último álbum de Presuntos con temas en su totalidad inéditos, Gente, había hecho sus pinitos en la producción. "Hay cosas en este disco, sobre todo relacionadas con sonidos electrónicos, que en Presuntos todavía no hemos hecho. Y me interesaba ir por ahí", explica. Por lo que se refiere a ese terreno, el de la producción y la electrónica, en Ojalá la cantante ha dado el do de pecho. Para ello ha contado con la estrecha colaboración de Vicente Sabater. Ha sido algo más que su "mano derecha". "Mis dos manos más bien", recalca. Durante meses, Sabater, productor, ingeniero de sonido y músico, y Giménez han trabajado codo con codo en los AC Estudis de aquél, en el extrarradio sur de Valencia. Otra importante aportación es la del pianista de jazz Ricardo Belda, que contribuye espléndidas armonizaciones.

El "ejercicio de estilo" ha sido sobre todo, además de la producción, en la interpretación. Por eso la cantante ha optado por versiones, dejando a un lado la composición. El disco sólo incluye una canción suya, Guitarra y voz, que ya grabó en uno de los primeros álbumes de Presuntos, para cambiarla. "Si escuchas la letra es una especie de homenaje a todas esas canciones que me han llenado", subraya. Se refiere a canciones monumentales como What's going on, una referencia esencial en la historia de la música negra que hizo popular Marvin Gaye, o La vie en rose, la más antigua de las elegidas y en la que Sole Giménez se explaya en la lengua de la ciudad que le vio nacer, París. Tampoco es moco de pavo atreverse con Venus as a boy, una deliciosa pieza de Björk o Tears in heaven, "la más delicada", en palabras de Sole Giménez, porque Eric Clapton la concibió a raiz de la muerte de su hijo. No falta una referencia italiana, de la mano del romántico Claudio Baglioni, de quien eligió la muy pegadiza Sabato pomerigio, en versión española. Ni tampoco alguna emblemática pieza española de los ochenta, de sus grupos favoritos: Golpes Bajos y Radio Futura. La estatua del jardin botánico será, probablemente, el primer single que se desgaje del álbum. El tercer grupo español favorito es Esclarecidos, del que hay otra canción. El repertorio se cierra con dos temas de Piratas, una banda con la que Sole Giménez ya había colaborado. Y a todas se le ha "dado la vuelta". En Ojala no hay mimetismo.

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