Murallas fronterizas
Ahora una vez más en la noche apagada
como plantas crecen
murallas de clausura, murallas fronterizas
para custodiar los campos de mi amor
Ahora una vez más rumores de la ciudad
como turbios bancos de peces asustados
emigran de mi oscura orilla
Ahora una vez más las ventanas
se abren al gozoso contacto de los perfumes dispersos
ahora los árboles, dormidos en el jardín, se desnudan de su corteza
y la tierra, a través de mil poros
absorbe confusas partículas de luna
Ahora
acércate más
y escucha
los obsesivos latidos del amor
que se propagan
como el tam tam de los negros tambores
en el canto tribal de mi cuerpo
Ahora las palomas
sobre las cimas de mis pechos vuelan
ahora en los capullos de mis labios
las mariposas de los besos se han sumido prestas a huir
ahora el mihrab
de mi cuerpo
para la oración de amor está dispuesto
Deja que deposite la carga de la luna en el refugio de la noche
deja que me llene
de pequeñas gotas de lluvia
de tiernos corazones
de formas de niños no nacidos
deja que me llene
tal vez mi amor
sea la cuna para el nuevo Mesías por nacer
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.