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EL ENREDO
Columna
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El novio y el marido

1. Tiene razón González:

El colmo de la modestia es el programa de Rajoy, que se resume en una frase: "Vótenme y no les pasará nada"

a veces nos falta ambición de país. Comienza la campaña electoral en España, y el PSOE promete empleo, educación, bienestar... Comienza la campaña en EE UU, y Bush promete viajes a Marte. Eso es poderío. Zapatero podría prometer viajes a Badajoz. Por lo menos para los que vivan en Cáceres. El colmo de la modestia es el programa de Rajoy, que se resume en una frase: "Vótenme y no les pasará nada". No habrá cambios, no habrá alborotos ni líos. "¡Cuatro años sin nada, amigos y amigas!". Zapatero se presenta como un buen novio, y Rajoy, como un buen marido. Es lo que hay. Quienes prefieran a Rajoy como marido, considerarán a Zapatero buen chico, emprendedor e ilusionado, pero algo tarambana. Quienes prefieran a Zapatero como novio, verán en Rajoy el aburrimiento mortal de una vida con el paseo del domingo por la mañana como mayor aventura.

2. Lástima que no haya debates

electorales, porque en marzo los candidatos ya habrán agotado las promesas lógicas y tendrán que prometer disparates. Diría Zapatero: "Nos comprometemos a azotar niños, a los viejos les inocularemos la viruela, contaminaremos los ríos, y ni un solo servicio público funcionará como es debido. ¡Vóteme y amárguese la vida!". Rajoy replicaría: "Con nosotros, la vivienda estará muy cara, no habrá justicia, nos meteremos en guerras y por todo el país se extenderá una plaga de tristeza. ¡Vóteme y joróbese durante cuatro años!". (En cierto sentido, sería continuista este planteamiento de Rajoy).

3. Desde el rigor de Hacienda,

Montoro denuncia la demagogia socialista, tanto gasto, tanto gasto... A continuación, siempre desde el rigor, Montoro anuncia un aumento en la paga mensual de cien euros para las madres. Ahí, ahí, Montoro. El dinero, en efectivo. Te podrán prometer guarderías y hospitales, pero donde esté el dinerete fresco... Cien euros para las madres... Y otros cien para los padres, no nos pongamos discriminatorios. Y cincuenta para los hijos, y veinte para parientes de segundo grado. Así se mantiene unida a la familia. Así, o nombrándoles para cargos. ¿Quién mejor que un hermano para un cargo de confianza?, se pregunta el jefe del Gobierno catalán, Carod-Rovira. Los anteriores preferían cuñados o hijos. En algo tenía que notarse el cambio. Al margen de bromas, es un debate que viene de antiguo: ya Camus le espetó a Sartre: "Entre Francia y mi madre, me quedo con mi madre". Estas filosofías extranjeras, al importarlas, se reinterpretan al modo español. Sí, Carod, sí, es tan español lo del hermano... Al final nos sale el nexo de unión por donde menos se espera.

4. ¡Y Llamazares acusa al PSOE

de presentar un programa económico liberal! Zapatero debe de estar rezando: "Que me llame ultraliberal, por favor, y que lo saquen por la tele". Ya sólo necesitaría que saltara Ibarretxe llamándole ultraespañolista, y se completarían dos semanas perfectas para Zapatero, que este domingo, en plena euforia, no lo descarten, capaz es de clausurar la conferencia política socialista prometiendo: "Después de estudiarlo a fondo... Sí, nos lo podemos permitir, ¡tol mundo pa Marte!".

MATT

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