Temor en el sector turístico de la Val d'Aran por un posible colapso

La sensación de colapso vivida estos últimos días en la Val d'Aran ha despertado la alarma en el sector turístico, principal motor económico del valle. Los hoteleros denuncian que la política urbanística de construcción masiva de segundas residencias y la falta de infraestructuras amenaza con afectar gravemente al turismo. Al apagón general del pasado 29 de diciembre, se han unido las colas de hasta tres horas de este fin de semana para cubrir el trayecto de los escasos 15 kilómetros que separan Vielha de la estación de esquí.

El Conselh Generau d'Aran, máximo órgano de autogobierno de la comarca de la Val d'Aran, ha anunciado la ampliación de la zona de estacionamiento de coches de la estación de esquí de Baqueira-Beret ante las críticas recibidas por el colapso circulatorio registrado el pasado fin de semana en la carretera de acceso al complejo invernal. Muchos esquiadores tardaron el sábado y el domingo pasados más de tres horas en recorrer los 15 kilómetros que separan Vielha de las pistas, el mismo tiempo que se tarda en llegar desde Barcelona.

Las autoridades aranesas, además de ampliar la capacidad del estacionamiento de Baqueira en más de 500 plazas, cuya gestión le ha traspasado la Generalitat, estudia otras medidas para evitar el caos de tráfico que se registra en el valle en momentos de máxima afluencia de esquiadores, como por ejemplo ampliar la única carretera de acceso a Baqueira o potenciar el transporte público.

La industria hotelera de la Val d'Aran, que durante estas fiestas de Navidad ha tenido una ocupación del 95 %, ha sido la que más se ha distinguido en sus críticas hacia las instituciones locales por la falta de planificación y previsión. El presidente del gremio de hostelería, Juan Antonio Serrano, ha pedido disculpas a los visitantes por las molestias que han sufrido durante los últimos días y reclama soluciones definitivas ante unos problemas que a su juicio han dado una mala imagen del valle.

Planes de expansión

Serrano atribuye el problema al modelo de crecimiento urbanístico incontrolado que se ha implantado en el valle y cree que no se resolverá ampliando el número de plazas de aparcamiento. "Cualquier solución que se adopte", dijo ayer el representante de los hosteleros, "será insuficiente si las autoridades no ponen coto al crecimiento desmesurado de segundas residencias". Serrano reclama una moratoria en la construcción de viviendas y una mejora de las infraestructuras viarias de la Val d'Aran; "puesto que de lo contrario pronto seremos otra Andorra".

Sin embargo, desde el sector inmobiliario, se pretende que la estación crezca hacia el municipio de Vielha-Mijaran. En declaraciones a la agencia Efe, el alcalde de esta localidad, Joan Riu, indicó ayer respecto a la opción de unir Vielha con Baqueira Beret: "Es indispensable para nuestro municipio, para el Medio y Bajo Aran". Para el síndic d'Aran, Carles Barrera, de no prosperar expansiones de la estación en el valle en los próximos años, ésta podría ampliarse en la nueva zona esquiable del Pallars Sobirà.

Otro proyecto en el que trabaja el Val d'Aran, concretamente el Ayuntamiento de Vielha, es en la reapertura de las pistas de esquí de la Tuca. Riu explicó que hay varios inversores interesados en reabrir este complejo, que en una primera fase tendría entrada por el pueblo de Betren y que más tarde, cuando se superara la cifra de entre 4.000 y 4.500 esquiadores, se expenderían las pistas hacia el valle de Escunhau y el puerto de Vielha.

Por otra parte, los afectados por el apagón podrán presentar sus reclamaciones hasta el 20 de febrero, según anunció el síndic Barrera. Ayer se reunieron representantes del Conselh Generau, de Fecsa-Endesa y de la compañía aseguradora para determinar el procedimiento para llenar las hojas de reclamaciones.