El coste del centralismo en la I+D+i

El peso de la participación valenciana en el conjunto de acciones y convocatorias de ayudas regionalizadas del Plan Nacional de I+D+i se ha ido adelgazando paulatinamente en el último sexenio, hasta descender en 2001 al quinto puesto de la clasificación de comunidades autónomas al haber conseguido 107,8 millones de euros -lo que supone un modesto 7,2% respecto del volumen total de fondos distribuidos por la Administración del Estado-, según el Informe del Alto Consejo Consultivo valenciano para la I+D+i publicado en 2003, cuyos índices coinciden también con los últimos indicadores nacionales que acaba de publicar el Ministerio de Ciencia y Tecnología, en base a las estadísticas internacionales elaboradas por el Eurostat y la OCDE.

"La baja captación en acciones especiales no es proporcional al peso de la I+D+i valenciana"

El precio de una política científica y tecnológica fuertemente "centralizada" tanto en las convocatorias nacionales como en la transferencia de las ayudas regionales procedentes de la UE

-tal y como ya advertía hace tres años la desaparecida Secretaría de Ciencia y Tecnología

valenciana- ha acabado situando a la Comunidad Valenciana por vez primera por detrás incluso de Andalucía (con un volumen de recursos estatales captado que representan el 8,8% del total español). Madrid, sigue siendo con diferencia, la autonomía con mayor volumen de recursos estatales captados (un 25% del conjunto de fondos procedentes de los diferentes programas y convocatorias nacionales); seguida de Cataluña (con un 22,6% de recursos conseguidos); País Vasco (9,1%) y Andalucía con el citado 8,8%.

Solamente se altera "ligeramente" esta clasificación, según el Informe 2003 del Alto Consejo Consultivo de la Generalitat Valenciana, en el apartado de "fondos procedentes de subvenciones a fondo perdido, donde la Comunidad consigue el 8,9% del total, superando al País Vasco", que sufre una severa penalización en varios de los programas estatales. En la mayoría de convocatorias, no obstante, el Gobierno de Aznar no parece haber tenido en cuenta, más bien al contrario, el hecho de que en el ejecutivo autonómico fuera del mismo signo en el reparto de los fondos nacionales para ciencia y tecnología.

- Ayudas para Proyectos de I+D.El Informe 2003 del Alto Consejo estima que de los 107,8 millones de euros (17.926 millones de pesetas) captados en 2001, la mayor parte de los fondos proceden de proyectos de I+D (unos 10.017 millones de pesetas), lo que supone tan sólo el 6% del total nacional; seguidos por los destinados por el Estado para equipamiento científico y tecnológico (3.889 millones), solicitados básicamente por el conjunto de las cinco universidades públicas valencianas para proyectos específicos, lo que supone un 9,4% del total de las ayudas estatales concedidas. En ninguno de los casos se alcanza el 10% estándar que ocupa la Comunidad Valenciana tanto en referencia al PIB nacional como en todos los indicadores del sistema universitario español.

- Fondos para Acciones Especiales. "El resultado relativo más desfavorable se obtiene en las acciones especiales, "donde la presencia valenciana apenas consigue 218 millones de pesetas (3,7% de España)", puntualiza el ACC. "La baja captación de fondos nacionales en esta convocatoria es desproporcionada frente al peso relativo de la I+D+i valenciana en el conjunto nacional, y aún lo es más, con mayor insistencia, respecto a la ratio de recursos captados por cada 100 investigadores, con sólo 3,5 millones para la Comunidad, frente a la media nacional de 7,4 millones).

- Convocatorias estatales para "grandes objetivos". Sólo si se analizan las convocatorias estatales agrupadas por "grandes objetivos", la Comunidad logra una presencia del 10,6% en el Programa para el Progreso General del Conocimiento (PGC), superior al 7,5% del ejercicio anterior. Aunque el Alto Consejo valenciano subraya que los 1.064 millones de pesetas captados en este programa no suponen 10% del total obtenido para proyectos de I+D dado "el limitado alcance presupuestario de este programa". Sólo en las convocatorias para potenciar la recuperación de cerebros -dentro del publicitado Programa Ramón y Cajal que se ha visto abocado a acortar su versión quinquenal y desaparecerá este año con la última convocatoria-, la Comunidad "ha ocupado un lugar destacado, con 633,4 millones de pesetas, equivalentes al 11,6% del total nacional. Aunque la presencia global de la Comunidad en este objetivo estratégico del Plan Nacional es algo más modesta, y supone un ajustado 10%).

- Créditos y anticipos reintegrales. El informe del Alto Consejo concluye con una severa advertencia que alerta de que "la posición final de la Comunidad Valenciana [por detrás del volumen de fondos adjudicados por la Administración del Estado a Madrid, Cataluña, País Vasco y Andalucía] se consuma con la escasa captación conseguida en el apartado de anticipos reintegrables, que acompañan a las diversas convocatorias nacionales".

- Ayudas del PROFIT para empresas innovadoras.El ACC hace hincapié, dentro de este tipo de ayudas, "en particular a las escasa presencia valenciana en las ayudas derivadas del PROFIT" para transferencia tecnológica a empresas. No sin cierta ironía, el Informe 2003 concluye que: "La orientación del PROFIT no parece coincidir con las preferencias de las empresas innovadoras valencianas, dado que sólo han obtenido el 3% de esta modalidad de apoyos públicos".