De conflicto territorial a musical

Los musicales siguen de moda en los países eslavos de la ex Unión Soviética. A pesar de la tragedia ocurrida el año pasado en Moscú, que terminó con la muerte de centenar y medio de personas cuando las fuerzas de asalto rusas utilizaron un gas asesino para neutralizar al comando de chechenos suicidas que había tomado como rehenes tanto a los actores como a los espectadores de la obra Nord-Ost, nuevos musicales se estrenan cada temporada. Se acaba de montar con gran éxito Las doce sillas, basado en la divertidísima novela homónima de Ilf y Petrov. Y en Kiev, la capital ucrania, este mes se estrenará en el teatro Suziria (Constelación) un musical inspirado en el conflicto territorial que hace poco estalló entre Rusia y Ucrania en torno a la isla de Tuzla, en el mar de Azov. Uno de los autores es Dmitri Kiseliov, famoso presentador de la televisión rusa en la década pasada. Un chófer ruso, que trabaja con su excavadora en el dique que construían desde la península de Tamán hacia Tuzla, se enamora de una joven ucrania, habitante de esta isla. Por las noches, el chófer iba a visitar a su amada, pero ésta, aunque le correspondía, cayó presa de las ideas nacionalistas y terminó matándolo. "Me has conquistado, pero jamás conquistarás Tuzla", exclama la bella ucrania antes de asesinar a su amado. La obra recuerda la famosa novela de Borís Lavreniov El Cuarenta y Uno, y la película que se hizo basada en ella. Allí, una bolchevique, que servía en el Ejército Rojo, se enamora en una isla deshabitada, que queda más o menos en la misma zona que Tuzla, de su prisionero, un oficial de la Guardia Blanca, que luchaba contra los soviéticos. Después de cuidar al enemigo herido y tener un breve pero apasionado amor con él, la bolchevique, al ver que vienen los blancos, dispara contra su amado prisionero.-