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Reportaje:ACTIVIDAD / FRANQUICIAS

Llega el periodo de consolidación

La franquicia alcanzó los 11.968 millones de euros de facturación en 2002, pese a un menor número de enseñas

El sistema de franquicia facturó el ejercicio pasado cerca de 12.000 millones de euros, cantidad que representa un crecimiento del 4,7% respecto al año anterior, según el último informe de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF). Ese estudio recoge un descenso en el número de enseñas, que han pasado de las 646 de 2001 a las 634 registradas a diciembre de 2002.

La pujanza del sector, que emplea a 154.283 personas en España, ha favorecido la presencia de locales comerciales en los centros de las ciudades
Las cadenas más fuertes del sistema de franquicia han tocado techo en España y en estos momentos se preparan para crecer en los mercados exteriores

En este contexto, Valencia acoge la semana que viene la celebración del Sif & Co, el Salón Internacional de la Franquicia, las Oportunidades de Negocio y el Comercio Asociado. Certámen que este año viene marcado por la internacionalización del sector y por la apertura, que empieza en el propio salón, hacia líneas emergentes de negocio.

"Las cadenas más fuertes ya no tienen mucha posibilidad de crecimiento dentro de nuestro país, por lo que deben dar el salto al exterior si quieren crecer", explica Santiago Barbadillo, director general de Barbadillo y Asociados. Por otra parte, añade, "nuestras cadenas tienen muchas posibilidades de exportar su negocio a países vecinos y, sobre todo, a las economías emergentes de América Latina, Este de Europa, y en particular a China, donde este modelo de negocio tiene un éxito fulgurante en la actualidad".

Contar con el respaldo de una marca reconocida y los beneficios derivados de las economías de escala son razones potentes para que un negocio funcione y éste es el secreto fundamental de una franquicia. La impresión de las fuentes consultadas es que esta fórmula comercial entra a partir de ahora en un periodo de consolidación, en el cual algunos inevitablemente se quedarán en el camino, mientras que las nuevas oportunidades de negocio, en forma de nuevos sectores emergentes, tales como centros de salud y, en general, todo lo relacionado con el cuidado personal, darán paso a gente distinta.

Para el presidente de la AEF, Xavier Vallhonrat, "el incremento del volumen de facturación se debe a la evidente evolución favorable de las enseñas existentes, mientras que la reducción de enseñas o empresas franquiciadoras se ha debido a que, o bien han desaparecido, o ya no cumplen los requisitos que se exigen para ser franquiciador; pero, en cualquier caso, se aprecia un periodo de consolidación en el que por otra parte quedan aún cosas por descubrir".

Fase de madurez

Para Santiago Barbadillo, "el sector ha alcanzado una fase de madurez, caracterizada por la consolidación del sistema a todos los niveles y en todos los ámbitos, se ha profesionalizado notablemente, y al tiempo aún queda mucho espacio para nuevos negocios".

Este sistema proporciona empleo en España a 154.283 personas, de las que un 24,56% pertenecen a establecimientos propios y el 75,44% a franquiciados. En cuanto al número de establecimientos, las cifras que maneja el Salón Internacional de la Franquicia señalan 38.432 locales, 8.733 propios y 29.699 franquiciados. Madrid y Barcelona concentran, un año más, el mayor número de enseñas. A finales de 2002, trabajaban en Madrid 205 empresas franquiciadoras que generaron el 48,13% del volumen total de facturación del sistema. En cuanto a Cataluña, contaba con 198 enseñas, un 28,45% del total de ventas. La Comunidad Valenciana con 57 y Andalucía con 46 son las siguientes.

Las 634 empresas franquiciadoras que trabajan en España pertenecen a 23 sectores, y del total, alimentación con más de 20 enseñas facturó 3.259.526.000 euros en 2002 lo que convierte este sector en el líder del sistema, tanto por facturación como por número de enseñas. Tras él destaca hostelería y restauración, al que sigue confección, moda y complementos. Hostelería cuenta con 94 firmas, 5.767 establecimientos y 48.130 empleados, y en 2002 alcanzó una facturación de 2.595.826.000 euros. En cuanto a confección, durante el pasado año contaba con 128 enseñas y 4.719 establecimientos, que proporcionaban empleo a 12.545 personas, La facturación alcanzó 1.777.016.000 euros.

Para ser considerado franquiciador el Código Europeo de la Franquicia exige ser una entidad nacional o extranjera, que corresponda a un concepto de negocio probado a través de centros piloto; posea know how propio diferenciado y transmisible; ostente la propiedad o licencia de uso de las marcas y distintivos de las enseñas, y tenga la capacidad de dar formación y asistencia técnica a sus franquiciados.

Entre otras cosas, como el lograr financiación, para desarrollar la fórmula franquicia hay que contar con locales adecuados y éste es un asunto que no está exento de problemas, dado que el inmobiliario es un sector disparado en cuanto a precios y saturado en lo que a buenas localizaciones se refiere. Sin embargo hay alternativas. Para Santiago Barbadillo, "el comercio tradicional ocupa una posición predominante, aunque la tendencia es a que vaya siendo sustituido por las franquicias, sobre todo en los centros de las ciudades, cascos históricos, zonas de tráfico peatonal y centros comerciales".

Un informe realizado por la consultora internacional CB Richard Ellis sobre el comercio minorista madrileño señala que la superficie total alquilada para esta clase de negocio en 2002 fue de 83.000 metros cuadrados, correspondiendo un 67% de ellos a franquicias, sector que se ha consolidado como principal impulsor de la demanda de superficies comerciales. La pujanza de las franquicias y de los sectores ligados al ocio han dinamizado el sector de locales en el centro urbano de las ciudades. El mismo informe añade que, la escasez de oferta originó un aumento medio de los precios de alquiler del 4,5% anual en varias zonas, durante el pasado año.

En cuanto a la formación del sector, algunos expertos consideran que no es lo suficientemente adecuada y aconsejan que debería estudiarse la franquicia en las escuelas de negocios. "Pero a parte del nivel académico, tampoco hay demasiada actividad formativa en las franquicias respecto al franquiciado, y es un aspecto que debería cuidarse más. Al fin y al cabo el know how es la garantía de éxito de la franquicia", considera Inmaculada Santainés, directora del Sif & Co.

Respecto a la incorporación de las nuevas tecnologías al sistema de franquicia, las fuentes consultadas coinciden en señalar que es un hecho que la mayor parte de los negocios cuentan de una forma u otra con un sitio en Internet.

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