¿Qué fue de Piterman?
El empresario logra la presidencia del Cantabria, de balonmano; duda si acudir a la ampliación de capital del Racing, y juega al fútbol playero
¿Qué hace ahora Dimitri Piterman? Atiende sus negocios, para lo cual viaja con frecuencia a Estados Unidos; preside el Club Balonmano Cantabria, de la Liga Asobal, y los domingos madruga para defender los colores del Picos de Europa en un campeonato de fútbol playero.
Desde el pasado lunes, Piterman es el presidente del Cantabria, antiguo Teka. La suya fue la única candidatura en las recientes elecciones. Llega consciente de la falta de liquidez del club, como le pasó con el Racing, para hacer frente a las nóminas. La situación es complicada. Las subvenciones oficiales de este año se usaron para el presupuesto del pasado curso. Los gastos rondan los 90.000 euros mensuales, por lo que Piterman debe hacer frente a un desembolso inicial de más de 600.000. El Ayuntamiento de Santander y el Gobierno regional han confirmado su apoyo, pero no pueden adelantar nada.
Piterman presidió el Racing, con permiso de los máximos accionistas, desde finales de enero pasado hasta el 8 de julio. Santiago Díaz tuvo acceso luego a la presidencia, por primera vez, ante la demora del empresario norteamericano de origen ucraniano en adquirir la mayoría de las acciones. Desde entonces, Piterman es consejero sin poder ejecutivo alguno. Mantiene el 24,6% de los títulos y hace frente a los avales de seis millones contraídos con Caja Cantabria por un crédito participativo. Acude a los partidos con su esposa y sus hijos y ocupa un sitio en el palco.
Piterman deberá ingresar próximamente, si pretende mantener su porcentaje, cerca de dos millones de euros, ya que el Racing ha acordado una nueva ampliación de capital. En caso de pretender el 51%, tendrá que lograr que haya socios que le vendan acciones y aportar otros dos millones. "Ya veremos...", dice.
Mientras tanto, Piterman reside con su familia en un chalé cerca de Santander, en el Alto Maliaño, frente al aeropuerto de Parayas. Su actividad deportiva no ha terminado. A sus 40 años, se entrena a diario y no olvida que fue triplista: "En diferentes torneos, gané a los tres medallistas olímpicos de Barcelona 92". Pero ahora su deporte es el gimnasio y el fútbol playa.
El pasado domingo llegó con retraso al campeonato de fútbol playero. Se temía que no llegara a tiempo, pues volvía de una larga estancia en Estados Unidos. La cita era en el campo 6 de la segunda playa de El Sardinero. En el Picos de Europa, uno de los equipos destacados, el delantero centro titular es Jesús Gómez Cos, el entrenador que se trajo al Racing cuando llegó del Palamós. Piterman se ha convertido en su recambio natural. Emilio García, el técnico, comenta: "Es correcto, acepta nuestras decisiones y jamás impone su criterio. Siempre aguarda, paciente, a que le dé entrada". Se calienta, a pecho descubierto en pleno otoño, durante unos 20 minutos corriendo sobre la ola muerta. Conoce al detalle lo que es un torneo para jugadores de más de 28 años. Valen todas las sustituciones; el fuera de juego sólo se da a partir de una raya por delante de la frontal del área; no se pueden usar playeras, sino pinkis de goma, y la portería mide 6 por 2,20 metros. Cada conjunto tiene que portar y plantar la suya, cambiarse al aire libre y dibujar en la arena las líneas de su cancha.
Como delantero, Piterman debe aprender. El último día tuvo que recurrir al esparadrapo para ponerse el número. Falló dos goles por falta de reflejos.
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