84 kilos de 'rovellons' en una mañana

Un cesto con 84 kilos de rovellons que recogió durante la mañana de ayer Alfred Prados, un experto buscador de setas, se llevó el premio del concurso de setas de Berga (Berguedà). Prados consiguió reunir el preciado botín en tan sólo la mañana de ayer. El concurso de setas de Berga llegó ayer a la 47 edición, con buen estado de salud -las 5.000 personas que visitaron la ciudad lo testifican- y en el punto álgido de la campaña de recolección de setas, una temporada algo remolona en la comarca, pero que finalmente está dando buenos frutos.

El concurso de setas es, de hecho, una fiesta completa. La cocina, el desayuno, los homenajes, la construcción de una falla y su quema son elementos que completan el concurso que ganó Prados, vecino de Cal Rosal, una colonia textil situada entre los municipios de Berga, Olvan y Gironella. Era la primera vez que este boletaire participaba en el concurso, pero él mismo reconoce que es un asiduo de los bosques. Prados se llevó el premio en metálico, unos 300 euros, y si vendió todos los kilos de rovellons ingresó una cifra próxima a los 850 euros. Ayer, el precio de venta al público de este tipo de setas oscilaba entre los 14 y los 20 euros el kilo, según la calidad del rovelló.

En el concurso participaron un total de 150 boletaires. Entre los que no se quisieron perder la fiesta de las setas estaba una amplia representación de la teleserie de sobremesa de TV-3, El cor de la ciutat. Margarida Minguillón, Jordi Díaz, Carme Abril, Mariona Ribas y Quim Gutiérrez fueron algunos de los actores que disfrutaron de un fin de semana de rovellons y llanegues en un restaurante de Guardiola de Berguedà y recibieron las clases magistrales del gastrónomo Toni Massanès.