El PSOE, ante el espejo del poder

¿Qué animó al PSOE de los ochenta a emprender la conquista del corazón y la mente de los españoles? Seguramente "la rebelión contra la historia de la España paleta, autárquica y clerical" y fue Felipe González, seguramente, el corazón de las reformas en España. Esta consideración surge como una más, de la lectura del libro La memoria recuperada, con el subtítulo de Lo que nunca han contado Felipe González y los dirigentes socialistas, escrito por la periodista María Antonia Iglesias, editado por Aguilar y presentado anoche en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Y es verdad lo que dice el reclamo de la obra. Nunca antes los dirigentes socialistas y ministros de Felipe González habían contado con tanta crudeza el porqué de mucho de lo que hicieron y las causas de muchas de sus desgracias. Los presentadores de la obra, con el tono más frío y sobrio del que fueron capaces, no ahorraron adjetivos de elogio hacia esta obra de Iglesias en la que a lo largo de mil páginas los personajes del socialismo más importantes entre 1982 y 1996 narran sus cuitas.

El director de la Escuela de Periodismo de EL PAÍS, Joaquín Estefanía, en cuya etapa de director del periódico se desarrollaron los hechos que estos socialistas cuentan, fue quien apuntó las dos ideas transversales que, a su juicio, recorren el libro. Por un lado, el regeneracionismo, y esa rebelión contra la historia más negra de España. "En buena parte lo consiguieron". De otro, y ya en el terreno más personal, citó dos nombres propios que aparecen mencionados profusamente en el libro por todos los narradores. Por un lado, Nicolás Redondo, ex secretario general de la UGT. "Muchos de los entrevistados por María Antonia le tratan con gran dureza, quizá porque con sus discrepancias restó a los Gobiernos de González la legitimidad de la izquierda", interpretó Estefanía. Juan Alberto Belloch, ex ministro de Justicia e Interior, es el otro personaje que cita Estefanía. "Se dicen de él cosas terribles; el villano de esta historia es Belloch", dice el periodista en función de lo que ha leído. González, según la descripción de Estefanía, es citado por todos los personajes y todos le reconocen "como el corazón de las reformas en España".

No cabe duda de que para los presentadores de esta obra, Iglesias ha conseguido uno de los objetivos que pretendía, cual fue recuperar la memoria de la tarea realizada por González y sus gentes entre 1982 y 1996, en el intento que existe de "poner un muro de ladrillo y de lodo" que la sepulte. El historiador Javier Tusell, otro de los presentadores del libro, afirmó sin ambages que con esta obra "excelente" la etapa socialista "entra en la historia; hay un antes y un después de esta obra y ahí quedan ya los grandes errores y los grandes aciertos". Muchos de los entrevistados por Iglesias acudieron anoche a la cita. Los ex ministros del Interior José Luis Corcuera y José Barrionuevo, así como el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, y el ex secretario general del PSOE Joaquín Almunia. Los relatos de Almunia, de José María Maravall, ex ministro de Educación, así como el testimonio del presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, fueron especialmente citados "por su sinceridad" por la periodista Victoria Prego, directora adjunta de El Mundo, para quien gracias a la autora del libro "la labor de los socialistas no quedará sepultada por esos últimos años de problemas". Hubo una recomendación de lectura del libro a dos grupos muy diferentes, y lo hizo Estefanía. Por un lado a la "derecha inteligente, para que sepa qué es lo que no puede destruir". El segundo grupo sería la nueva dirección del PSOE. Con amplia sonrisa, acogieron la recomendación los allí presentes del grupo que ahora dirige los destinos del PSOE: José Blanco, Manuel Marín, Álvaro Cuesta y Carmen Chacón. Todos asintieron con la cabeza, quizá porque tienen muy presente que José Luis Rodríguez Zapatero presentó su candidatura a la secretaría general reivindicando y asumiendo "toda la historia" de los gobiernos de González.