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Reportaje:

El alcalde dirige el tráfico

El primer edil de Fuerte del Rey, tras cortar el acceso a su pueblo, suple la escasez de policías

Ginés Donaire

De Juan Antonio Galán, alcalde de Fuerte del Rey (Jaén), sus vecinos conocían su espíritu solidario (cada mes dona su sueldo a las familias más desfavorecidas) y su pasión por su pueblo, que le llevó el pasado mes de mayo a aumentar, al frente de la lista del PP, el respaldo popular en las elecciones municipales. Sin embargo, Galán todavía tenía preparada una sorpresa a sus paisanos: convertirse en improvisado policía municipal. Por supuesto, también de forma altruista.

Todos los lugareños y los conductores que esta semana han tenido que atravesar con sus vehículos la travesía de Fuerte del Rey, un pequeño pueblo de apenas 1.200 habitantes situado a escasos diez kilómetros de la capital, no han salido de su asombro al comprobar cómo era el propio alcalde el que regulaba el tráfico en el centro de la localidad. Su función de agente la ha llevado a cabo compaginándola con la alcaldía y para turnarse con el único policía local que hay en el pueblo.

Un solo agente era necesario hasta ahora en Fuerte del Rey, un pueblo tranquilo por el que sólo circulaban los vehículos que accedían al mismo. Sin embargo, esta semana la Delegación de Obras Públicas se ha visto obligada a cortar la carretera de circunvalación que conecta Jaén con Andújar para reparar las obras de hundimiento de la calzada, y todo el tráfico se ha desviado por la travesía de Fuerte del Rey.

"La situación fue caótica al principio, sobre todo el primer día, y me tuvieron que ayudar a regular el tráfico otros concejales", explica Juan Antonio Galán, que recuerda el "lío monumental" que se formó por la dificultad de los camiones, autobuses y otros vehículos pesados para atravesar el pueblo, sin semáforos y ni pasos de cebra. "Hubo un camión del butano atrancado junto al hogar del jubilado que nos puso a todos muy nerviosos", agrega el alcalde. Ayer mismo se registró un choque entre dos vehículos que se saldó sin heridos.

El alcalde no ha ocultado su malestar por el hecho de que Obras Públicas no le avisase con antelación de este brusco cambio en el tráfico. Tal fue su indignación que el pasado martes, ni corto ni perezoso, asumió la responsabilidad, después de convocar un pleno extraordinario, de cortar el acceso al pueblo, con lo que dejó embotellados a todos los vehículos que hacían el trayecto Jaén-Andújar. Las quejas de los conductores no se hicieron esperar y apenas una hora después se desplazaron hasta el pueblo dos patrullas de la Guardia Civil. Juan Antonio Galán reconoce que recibió una dura reprimenda del propio subdelegado del Gobierno, Francisco López Pastor, de su propio partido.

No obstante, su medida de fuerza parece que dio resultado, puesto que la Guardia Civil ha prohibido el paso por esta vía de los vehículos pesados y ha logrado el compromiso de Obras Públicas de finalizar las obras de la circunvalación la próxima semana. El alcalde se muestra escéptico y alerta del grave riesgo que habrá el próximo lunes al atravesar la carretera las puertas del colegio público. Mientras tanto, Galán seguirá haciendo de policía local.

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