Una avería obliga a un avión a volver a Barajas a los 90 minutos de despegar

El vuelo de Spanair 137 entre Madrid y Oslo (Noruega) tuvo que regresar al aeropuerto de Barajas aproximadamente una hora y media después de haber despegado de Barajas a causa de un problema detectado por el piloto en la puerta de la bodega de la aeronave, aunque el aterrizaje se desarrolló con "total normalidad".

Según informaron fuentes aeroportuarias, las autoridades de Barajas activaron la alerta local a las 10.37 y permaneció operativa hasta las 11.45, después de que tomara tierra la aeronave. Los mismos medios aseguraron que no hizo falta la intervención de los agentes que se movilizan cuando se declara este nivel de emergencia; entre otros, bomberos, Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía y sanitarios.

El comandante del vuelo de Spanair informó al aeropuerto madrileño, momentos después de despegar, de que se había encendido un piloto en el cuadro de mandos que advertía de un problema en la puerta de la bodega porque ésta "no se cerraba bien", según comentaron a Efe varios de los pasajeros afectados.

El avión, que despegó desde Barajas a las 10.10, "estuvo dando vueltas por el aire durante más de una hora para quemar combustible" antes de proceder al aterrizaje, según señaló una de las viajeras.

"Estuvimos un poco nerviosos, aunque finalmente no ocurrió nada", declaró la misma pasajera.

Tras tomar tierra y desembarcar a los pasajeros, la aerolínea informó de que el vuelo iba a salir de nuevo rumbo a Oslo ayer por la tarde tras proceder al cambio de la aeronave.Al considerar que el problema iba a quedar solucionado en ese espacio de tiempo, la compañía Spanair distribuyó entre el pasaje bonos de comida.

La compañía Spanair, fundada en diciembre de 1986, dispone de una flota de 53 aeronaves.