Dos vuelos a Dublín salen con más de seis horas de retraso

Doscientos pasajeros de dos vuelos a Dublín (Irlanda) tuvieron que esperar más de seis horas en Barajas hasta que sus aviones despegaron en la noche del pasado sábado. Los vuelos afectados fueron uno de la compañía Iberia y otro de la irlandesa Aer Lingus. Sus salidas estaban previstas a la misma hora, las 19.30, pero no fue hasta la 1.25 y las 2.00, respectivamente, cuando los aviones pusieron rumbo a la capital irlandesa.

Uno de los viajeros allí presentes, que había contratado su vuelo por Internet a la compañía Aer Lingus, resumió el sábado la situación con una palabra: resignación. "Llevamos esperando seis horas y apenas nos han comunicado nada. Aunque hay gente que se ha puesto nerviosa, la mayoría permanecemos tranquilos, a la espera de que nos informen de alguna novedad", comentó este pasajero a la una de la mañana, cuando aún desconocía cuándo saldría su vuelo.

Las compañías achacaron el retraso al mal tiempo reinante en Dublín, que impedía la salida desde allí de los aviones que más tarde habrían de hacer el trayecto inverso. Sin embargo, según comentaron varios pasajeros que habían hablado con la capital irlandesa, el tiempo "no era, ni mucho menos, tan adverso como para impedir el despegue de aviones".

Con el discurrir de las horas, el hambre hizo acto de presencia. Una sopa dispensada por los servicios de las compañías aéreas ayudó a mitigarla, aunque hubo quien, como una turista holandesa, hizo acopio de alimentos en alguna tienda del aeropuerto para compartirlo con el resto de los pasajeros.

Poco antes de la una de la mañana, Iberia avisó a los pasajeros de su vuelo de que el avión ya había llegado y que sólo restaban las labores técnicas y de mantenimiento. El avión partió a la una y media. Más de treinta minutos más tarde salió el aparato de Aer Lingus.