Entre el estudio y la mudanza

Para Carlos Goñi, líder de la más popular de las bandas valencianas de rock & roll, este verano es atípico. "Creo que descansaré del 5 al 15 de agosto, algo que no había hecho desde hace cuatro años", afirma. Un descanso incompleto, como se verá a continuación. Lo normal para este madrileño criado en Alicante y afincado los últimos veinte años en Valencia, es estar de gira en verano, pero este año el ritmo ha cambiado. Revólver acabó la gira de presentación del álbum 8.30 A.M. el pasado mes de abril y Goñi aprovechó el mes de mayo para ultimar la producción del nuevo disco de Los Rebeldes, que saldrá al mercado en septiembre y en el que previsiblemente se notará la mano del productor. "Creo que suena más a John Fogerty que a rock-a-billy", aventura. Y tras Los Rebeldes se embarcó en la producción de un nuevo grupo navarro, Lengua de Trapo, en los Estudios Mojave, de los que Goñi es propietario. "Suenan muy bien, son potentes. El día 5 el disco estará terminado".

Pero a título personal, la gran novedad para este cantante, compositor, guitarrista y productor es el cambio de residencia. "Este mes nos mudamos a vivir a Alicante", anuncia. Después de varios años en L'Eliana, podrá disfrutar con su familia de una casa frente al mar entre El Campello y Benidorm. "En realidad", puntualiza, "espero disfrutarlo de verdad el verano que viene, si me dejan". Ahora Carlos Goñi tiene un motivo añadido para gozar de la vida familiar: Se llama Alicia, una niña adoptada que lleva unos meses con ellos. A pesar del cambio de residencia, mantendrá el estudio de grabación en Valencia. "Vendré a L'Eliana cuando tenga que hacer producciones", aclara. Y eso es tan pronto como dentro de unos días. "En la segunda quincena de agosto me encerraré con la banda para preparar dos nuevos temas para un grandes éxitos de Revólver que aparecerá en Navidades", explica, aunque no le hace mucha gracia lo de "grandes éxitos". En realidad, se trata de un recopilatorio de singles al que se añaden dos versiones en castellano de compositores americanos.

El caso es que dedicará parte del tiempo previsto para el descanso a ultimar las traducciones de ambas versiones. Goñi puntualiza que en este caso, al tratarse de adaptaciones más o menos libres a una lengua distinta del inglés, requieren el visto bueno de los propietarios de las canciones. También aprovechará para escuchar las maquetas de lo próximo que ha de producir. Lo más inmediato es Garage, una banda de Murcia que, por pura coincidencia, tiene el mismo nombre que el grupo con el que Goñi se dio a conocer en Valencia a principios de los ochenta, recién llegado de Alicante. Y está, asimismo, el trabajo de composición. "Me había planteado no hacer una nueva canción hasta final de año", pero, confiesa, "me he habituado a escribir de 8 de la mañana a 12 del mediodía y sigo haciéndolo, porque es cuando más me cunde". Al preguntarle si está en plena vena creativa, responde: "Unas veces te sale mejor que otras. La cuestión es ponerte a trabajar todos los días". Agosto incluido.