En defensa de Piqué

El 19 de julio, Pilar Rahola ataca al PP y a Piqué por acusar de nazis a quienes les critican. Piqué tiene razón porque entre los partidos nacionalistas y de izquierda se ha extendido la idea de que el PP es un partido facha, heredero directo del franquismo, con propuestas fachas y despreciables. Ello ha llevado a que estas fuerzas políticas tengan respecto del PP una actitud sectaria y despectiva como no tienen con ningún otro adversario político y, lo peor, a alentar entre militantes y simpatizantes un odio visceral hacia él que, efectivamente, las hace caer frecuentemente en actitudes fascistas. ¿Cómo calificaría Rahola las pintadas, los insultos, las agresiones y el no dejar hablar a sus dirigentes, hechos que no se han dado con ninguna otra fuerza política?

En el PP hay mucho franquista evolucionado, pero los que sabemos historia nos hemos de felicitar de que por vez primera en este país haya una derecha que acepta una Constitución y unos estatutos, y cree en la democracia. Bienvenidos los franquistas evolucionados, que, por otra parte, también están en los partidos nacionalistas y en sectores de la izquierda.

Al menos Piqué sí lucho contra Franco desde el PSUC jugándose bastantes cosas y ganándose otras, entre ellas el derecho de acusar de intolerantes a quienes no respetan la libertad de expresión. De su militancia fui testigo como responsable político del PSUC en Económicas de la UB, donde él era uno de los militantes comunistas que lucharon por la libertad. En aquellos años de la transición hizo más por la democracia que muchos de los que hoy le acusan de facha.