La reunión de la cúpula del PP con los sectores enfrentados en Almería acaba sin acuerdo
El presidente de la Diputación afirma que "con buena voluntad" la crisis puede resolverse
La dirección del PP andaluz intentó ayer poner orden en la crisis que sufre esta formación en Almería. El secretario regional del PP, Antonio Sanz, y el vicesecretario de Organización, José Luis Sanz, se reunieron ayer con los dos sectores para buscar una salida al conflicto, que enfrenta a la dirección provincial, presidida por Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, con el alcalde de El Ejido, Juan Enciso, y su mano derecha y presidente de la Diputación provincial, José Añez. La cita comenzó por la mañana y terminó sobre las 21.00 sin ningún acuerdo, según fuentes del PP.
El momento más tenso de esta crisis se vivió el pasado jueves, cuando Enciso tildó de "terrorista político" a Rafael Hernando, portavoz nacional del PP y diputado por Almería. Pocas horas después, Enciso rectificó estas declaraciones, pero mantuvo que Hernando estaba desestabilizando al PP almeriense.
El mismo jueves, el secretario general del PP, Javier Arenas, ordenó al número dos de los populares andaluces, Antonio Sanz, que se desplazase hasta Almería para resolver la crisis, que tiene su origen en el reparto de poder interno en la Diputación provincial, presidida por José Añez, mano derecha de Juan Enciso.
La dirección provincial sostiene que Añez y Enciso han incumplido el pacto acordado entre las dos partes en Madrid hace dos semanas. En ese pacto se estableció que las dos vicepresidencias primeras de la Diputación (de un total de ocho) fueran para las diputadas Carmen Navarro y Ana Toro, afines a la dirección provincial.
El pasado martes, cinco de los ocho vicepresidentes anunciaron su renuncia al cargo porque consideraban que el equipo de gobierno diseñado por Añez no era "acorde al perfil diseñado en los acuerdos previos", en definitiva, que se incumplía el pacto cerrado en Madrid entre los dos sectores, que contó con la bendición de Hernando y Antonio Sanz.
A lo largo de la semana, esta crisis ha ido a más hasta el punto de que Antonio Sanz y José Luis Sanz mantuvieron ayer una reunión con los dos bandos para intentar conciliar los intereses de ambas partes.
La reunión mantenida por los dos miembros de la dirección regional con Añez y los diputados provinciales del PP, en la sede de la institución, se prolongó desde las 10.00 hasta las 15.30, hora en la que hicieron un receso para almorzar en Roquetas de Mar.
La reunión siguió por la tarde y terminó sobre las 21.00 sin posibilidad de acercar las posiciones entre los dos bandos enfrentados. Fuentes del PP apuntaron que Antonio Sanz volvió a Sevilla y no pudieron precisar si las conversaciones se van a retomar.
En un receso de la reunión, Añez intentó quitó hierro a la crisis y expresó su deseo de llegar a un acuerdo en la misma jornada: "Pienso que debería quedarse cerrado. En definitiva no hay grandes problemas. Los problemas quizá sean de matices. Con buena voluntad de todos debe quedarse cerrado", dijo. Este deseo finalmente no se cumplió, a tenor de lo apuntado por las fuentes consultadas.
Debilidad del presidente
En estos días, las críticas de Enciso a Rodríguez-Comendador, alcalde de Almería, han sido constantes. Sobre todo le ha reprochado su debilidad frente a la dirección nacional y la regional del PP. "Los genitales hay que ponerlos encima de la mesa cuando hay que ponerlos", ha llegado a decir Enciso sobre la composición del equipo de gobierno decida por Añez.
Mientras, el secretario de Organización del PSOE, Luis Pizarro, aseguró ayer que el secretario general del PP, Javier Arenas, es el "responsable" de las "crisis a nivel interno" que está viviendo el Partido Popular en provincias como Almería, Jaén o Málaga, con el fin de "debilitar" la a la presidenta regional, Teófila Martínez, y "controlar" la configuración de las candidaturas al Parlamento con motivo de los próximos comicios autonómicos, informa Europa Press.
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