Vacaciones con blindaje

Los seguros de asistencia en viaje son la estrella del verano. Están registrando un auge inusitado por la creciente preferencia de los españoles a salir al exterior y disfrutar de unas vacaciones cada vez más sofisticadas. Julio y agosto son los meses del boom de estos seguros, en los que se firma el 60% de las pólizas del año. Fuentes del sector aseguran que la contratación crecerá un 35% en este ejercicio.

El incremento en la demanda de viajes al extranjero y en los desplazamientos dentro de España por motivos de negocio y de congresos han catapultado el interés de los denominados seguros de viajero.

Entre julio y agosto se firma el 60% de las pólizas que se contratan durante todo el año

"Las coberturas que más relevancia tienen en el producto de asistencia son el robo, la demora o el deterioro del equipaje, los gastos por enfermedad o accidente, la responsabilidad civil y las indemnizaciones por muerte o invalidez", señala Roland Mett, director de Marketing de Winterthur en España. Según un estudio de Europ Assistance, las principales preocupaciones de los europeos en sus vacaciones son la necesidad de ayuda por parte de algún familiar, el robo de maletas o dinero y un desastre en su domicilio.

"Este año se está produciendo un auge de las coberturas relacionadas con la cancelación de los viajes. Nuestra compañía garantiza la recuperación del importe total de la reserva, admitiendo más de 30 motivos diferentes para cancelar. En la actualidad se benefician de ella unas 400.000 personas", señala Ramón Albiol, director comercial de Europ Assistance.

Una nueva generación de seguros que cubren riesgos a veces marginales se abre camino. Las pólizas para estudiantes que se van a estudiar a Londres, las de esquiadores y el contrato de protección contra robo o pérdida de tarjetas de crédito ya no suenan a chino.

"Cada año que pasa, el español viaja más al extranjero, elige destinos más lejanos y exóticos y actividades más arriesgadas. Pero, además, se ha producido un impulso del viajero de negocios, de incentivos, de convenciones", indica José Luis Sánchez Bascones, director general de Mapfre Asistencia.

"Las coberturas y servicios que normalmente se incluyen en este seguro son los relacionados con la asistencia médica, los equipajes, los accidentes, las incidencias del viaje, así como la responsabilidad civil y la anulación", indica José Luis Gómez Banovio, director del área Comercial y de Marketing del Grupo Mondial Assistance.

Un puñado de compañías

El sector está dominado por un puñado de compañías. Mapfre Asistencia, Mondial Assistance, Europ Assistance, Elviaseg y Winterthur son las más activas. Pero los seguros de asistencia se venden en todas las compañías.

El español sigue muy retrasado respecto a los europeos en este tipo de cobertura. Sólo el 10% de nuestros turistas viaja con seguro, mientras que ese porcentaje es cinco veces superior entre los europeos.

"Hay varios motivos que hacen que el número de españoles que adquieren este seguro aumente cada año. Entre éstos se halla el alto coste de las medicinas en países como EE UU o Canadá, entre otros, el incremento de precios en los billetes aéreos de larga distancia o la incertidumbre internacional. Sin llegar a niveles de Francia o Reino Unido, el español siente cada vez más necesidad de ir protegido en sus desplazamientos de ocio y profesionales", dice Ramón Albiol.

El seguro de asistencia en viaje complementa el de carretera, que cubre sólo al vehículo en la mayoría de los casos. Pero es difícil que se llegue a un combinado: unas compañías seguirán ofreciendo la cobertura al coche y otras a los viajeros. "El seguro de carretera cuenta con muchas de las coberturas del de viajes, como el desplazamiento de familiares en casos de enfermedad, envío de medicamentos o repatriación. Pero otras coberturas son propias de la asistencia en vacaciones y no se suelen dar en paquetes conjuntos", dice José Boada, presidente de Pelayo. Esta empresa ofrece coberturas en seguros de coche que van más allá de las clásicas. "Tratamos de ofrecer un servicio a las personas en cualquier otro aspecto".

El sector marcha viento en popa. El pasado año se registró un crecimiento del 17,5%, hasta los 200 millones de euros de facturación, según los datos de ICEA (en 2001 el crecimiento fue del 15,1%). Los expertos aseguran que el crecimiento de la asistencia en viaje es mucho mayor, ya que estas cifras mezclan el seguro de viajero y el de asistencia en viaje de los coches, que camina a un ritmo muy inferior. Sánchez Bascones estima que el crecimiento de la facturación en estos seguros alcanzará este año el 35%, mientras que Ramón Albiol se muestra más moderado y augura un alza del 22,5%.

"De mayo a julio son los meses más fuertes en estos seguros, cuya contratación está asociada a la de los viajes vacacionales. Su venta puede aumentar un 40% sobre cualquier otro mes", dice Gómez Banovio. Julio y agosto, agrega Sánchez Bascones, absorben el 60% de la contratación del año.

Roland Mett advierte sobre los factores a tener en cuenta al contratar este seguro: "Los principales son la duración del viaje, el destino, el número de personas que viajan y las garantías que se contratan y los límites de las coberturas".

Del 3% al 20% de sobrecoste

El coste normal de las pólizas de asistencia no suele superar el 3% del valor de las vacaciones en el tradicional supuesto de una familia que va a la playa a disfrutar del sol. Pero en los casos de destinos exóticos y en aquellos cuyo objetivo es lanzarse a la aventura, el coste puede elevarse hasta el 20% del valor total del viaje.

"Los factores que influyen en el precio del seguro son tres: naturaleza del viaje, duración y actividades a realizar. Los deportes de alto riesgo, como el descenso de ríos o las rutas de alta montaña, encarecen algo las primas a una banda entre el 7% y el 10% del valor total del viaje. Pero si el viaje es a un país donde no existe infraestructura en el caso de un accidente, el precio puede elevarse hasta el 20% del coste del viaje", dice Sánchez Bascones, director general de Mapfre Asistencia España.