ELA sitúa al Gobierno en la "vanguardia" del conservadurismo

El secretario general de ELA, Jose Elorrieta, elevó ayer el tono de sus críticas precedentes a la patronal y al Gobierno vasco y acusó directamente al Ejecutivo del lehendakari, Juan José Ibarretxe, de tener unos principios y unas prácticas "neoliberales" y de estar "a la vanguardia de las políticas más conservadoras". Elorrieta, que definió a su organización como un sindicato "de clase y abertzale", consideró que las políticas sociales y económicas del nacionalismo gobernante restan "gran parte de credibilidad" a las propuestas soberanistas que abanderan.

El líder del sindicato hegemónico vasco lanzó sus andanadas contra las Administraciones y los empresarios vascos en la clausura del congreso extraordinario de ELA, celebrado ayer en Bilbao. Con él se ha puesto fin a la profunda reorganización interna llevada a cabo por la central nacionalista, que ha reducido a cuatro sus federaciones y pretende mejorar su implantación territorial.

Elorrieta estableció como el principal de los objetivos de su sindicato "contribuir de forma activa, y desde una posición soberanista, a la superación del actual marco-jurídico político". El secretario general de ELA, que se adelantó al nacionalismo gobernante en declarar "muerto" el Estatuto de Gernika, volvió a evidenciar ayer que no da cheques en blanco al lehendakari Ibarretxe ni al PNV en la conducción de la estrategia soberanista. Por el contrario, partió de la crítica a la "cada vez más estrecha y visible" alianza de las Administraciones vascas con la patronal para descalificar las políticas sociales del Gobierno vasco, a las que tildó de "neoliberales".

Frente a la doctrina gubernamental, que pone los estándares autonómicos de servicios sociales por encima de la media europea, Elorrieta le reprochó la reducción del gasto social, su "tolerancia sobre el fraude fiscal", la reducción de la presión impositiva a las rentas de capital y la falta de solución al problema de la vivienda, cuando el Ejecutivo está cerrando sus presupuestos con superávit.

Contenido social

El líder de ELA, que ha convertido la central en un poder fáctico en el ámbito político, advirtió de que el avance de los postulados soberanistas debe ir acompañado de "contenidos sociales" que interesen a la mayoría de los ciudadanos. Jose Elorrieta, cuyo sindicato ha elevado la sustancialmente el nivel de conflictividad en la negociación de los convenios provinciales, puso especial énfasis en destacar la identidad de intereses entre la patronal y los "gobernantes vascos" en el campo laboral y sindical que, a su juicio, está desvirtuando el diálogo social y aceptando prácticas laborales "de auténtica explotación".

Mientras que desde CC OO y UGT se acusa al Gobierno vasco y a la patronal de haber favorecido el despegue de ELA, la central nacionalista les reprocha apoyarse en "el sindicalismo español" para "intentar conseguir sus propósitos", no respetando la mayoría sindical y "cerrando sistemáticamente acuerdos a la baja".