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El correcto uso de Internet por parte de los niños depende de la educación

Expertos en informática coincidieron en afirmar, durante unas jornadas celebradas en Málaga, que la cultura y la educación siguen siendo las principales herramientas que deben guiar el uso que los niños hagan de Internet para evitar que accedan a contenidos inadecuados o vejatorios, por encima de los filtrados que incorporan los navegadores.

Según el director del Parque Tecnológico de Andalucía, Felipe Romera, Internet supone un reto "que avanza mucho más rápido que todas las legislaciones y restricciones". Romera se mostró "poco optimista" con respecto a la eficacia de las normativas y los medios tecnológicos y consideró que una aplicación exhaustiva de los mismos "puede conducir a la censura". "Eso sería terrible porque el principal valor de Internet es la libertad", afirmó.

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La cultura y la educación, según Romera, son las armas que permiten a los niños hacer un uso crítico de la red y desarrollar la capacidad de escoger los contenidos beneficiosos e ignorar los que no les interesen. Esta capacidad de elección es especialmente importante cuando los contenidos no aparecen estrictamente separados y determinadas páginas que pueden ser utilizadas para trabajos escolares, como portales de turismo y periódicos digitales, ofrecen enlaces a sitios pornográficos o promotores de grupos violentos.

En cuanto a los instrumentos tecnológicos de restricción, el técnico de la empresa Ingenia Javier Almendro explicó que el más eficaz lo constituye el dispositivo de elaboración de listas negras, aunque hasta el momento este recurso sólo se encuentra al alcance de las empresas dado su elevado coste. Este servicio se alquila por un periodo de tiempo y consiste en una herramienta que se inserta en un punto del tráfico de la red conectado a una base de datos en la que están recogidas las páginas a las que se quiere denegar el acceso, con lo que los empleados de las compañías no pueden entrar a los mismos.

Para impedir que los niños visiten determinados sitios web, los padres pueden bloquear manualmente estas direcciones o programas de organizaciones, pero resulta "complicado", según Almendro.

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