El Valencia paga 600 euros por cada acción del club, 12,5 veces su valor nominal
Más de un accionista del Valencia disfrutará de unas vacaciones pagadas por el club de sus amores. Siempre y cuando esté dispuesto a vender sus títulos. Compradores no le faltan. El Valencia anunció ayer que un grupo de empresarios afín al consejo de administración compará títulos a partir de hoy al precio de 600 euros cada una, 12,5 veces su valor nominal, que fue de 48 euros. El club pretende "neutralizar" a Paco Roig, aspirante a la presidencia que la semana pasada anunció su compra de acciones también a 600 euros. En el trasfondo de esta subida espectacular del precio de los títulos están las elecciones a la presidencia de la sociedad, previstas para el verano. Y la encarnizada lucha por el poder entre Roig y los actuales dirigentes. Su presidente, Jaime Ortí, tildó a Roig de "tiburón" cuando éste anunció sus propósitos.
Roig ha fijado para hoy el comienzo de la adquisición de paquetes inferiores a 50 acciones, que serán pagadas con talones nominativos. El club también pone en marcha hoy la compra en sus propias oficinas. Y dice que tiene "la obligación moral" de salir en defensa del interés común de los aficionados. "Roig ha generado una situación crítica y de excepcional emergencia para la estabilidad del Valencia", dice una nota del club. "Hemos tomado la decisión firme de neutralizar este ataque a la concepción plural de nuestro club", añade. La sociedad no da los nombres del grupo de empresarios dispuesto a la adquisición, lo que ha indignado al ex presidente Roig, que contraataca: "La ley de sociedades anónimas prohíbe las compras para autocartera de la sociedad si no existe un acuerdo previo de la Junta General".
Roig es el máximo accionista de la entidad, con cerca de 35.000 títulos del total de 192.000, es decir, casi un 20%. Su objetivo es alcanzar el 40% que le daría un control absoluto sobre la sociedad, empezando por las próximas elecciones. Pero el actual consejo, que domina otras 35.000 acciones, confía en el voto del pequeño accionista para ganar los comicios. De ahí que haya entrado en esta pugna por el voto del pequeño accionista. El club asegura que se ha visto obligado a "garantizar la pluralidad" ante lo que califica como la "amenaza de que Roig acabe con los 84 años del Valencia".
126 millones de deuda
La entidad tiene una deuda de más de 126 millones de euros y Roig no se cansa de repetir que está al borde de la bancarrota. Siendo presidente del Valencia, Roig impulsó, en 1996, una ampliación de capital de 4,8 millones de euros y 102.000 títulos. E hizo acopio de miles de acciones a través de una gran red de testaferros que le permitió burlar el tope de nueve títulos de compra establecido en la junta general anterior.
Claro que también quedan románticos que no van a vender sus títulos. "No quiero que el Valencia deje de ser nuestro", dijo ayer José Carlos Ruiz, propietario de seis acciones desde que el club se viera obligado a convertirse en sociedad anónima deportiva, en 1992.
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