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Crónica:LA CRÓNICA | ELECCIONES 25M | Retratos urbanos
Crónica
Texto informativo con interpretación

Rodaje para las andaluzas

Lourdes Lucio

En el Partido Popular están convencidos de que el PSOE está preparando el terreno de las elecciones autonómicas y que el presidente de la Junta, Manuel Chaves, tomará la decisión de adelantar o no los comicios andaluces, previstos para la primavera de 2004, en función de los resultados del próximo domingo. Hay varios detalles de la campaña socialista que llevan a los populares a pensar de ese modo y uno de ellos es la información electoral regional en las televisiones públicas. Los socialistas disponen de 2 minutos y 10 segundos en Canal Sur y 2,30s en Televisión Española; el PP 1,42s y 2, respectivamente; IU 42s y 50s; y el Partido Andalucista 35s y 40s. La percepción de los populares es que la información electoral socialista la acaparan Chaves, el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y la vicesecretaria regional, Mar Moreno, mientras en la de ellos priman sus candidatos a las capitales. Los partidos, según admite una fuente del PP, sugieren a los servicios informativos de esas cadenas qué actos les interesa que cubran y, salvo en el caso de las visitas del número uno y dos del PP, José María Aznar y Javier Arenas -la mayoría de las veces en Sevilla o Marbella-, casi siempre prefieren las que participan sus alcaldables.

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La versión oficial que circula en el Partido Popular es que "desde el primer momento" se optó por una campaña muy centrada en lo local, donde los asuntos a debatir fueran municipales. Pero siendo cierta esta afirmación, también lo es el que, al contrario de los comicios de 1995 y 1999, se percibe que no hay un criterio regional de campaña. Uno de los motivos es que la presidenta del partido, también aspira a revalidar por tercera vez consecutiva su mayoría absoluta en la alcaldía de Cádiz y aunque ha estado no se la ha visto en otras circunscripciones. Otra razón menos amable es que tras la guerra contra Irak ha habido un desfondamiento del partido y las direcciones locales han puesto en marcha una estrategia de "sálvese quien pueda", centrándose en sacar adelante sus propios retos municipales. "A los alcaldes fuertes como Pedro Rodríguez en Huelva, o Francisco de la Torre en Málaga, la presencia regional o nacional no les aporta nada, aprovechan su propio tirón. Donde hay que ir es a sitios donde estamos peor, como en Granada, donde nadie quiere aparecer", afirma un dirigente.

En el PSOE nadie dice abiertamente que las municipales están sirviendo como rodaje de las andaluzas del año próximo, aunque la cargadísima agenda de actos de Manuel Chaves y las de los consejeros así lo indica. También los discursos de los dirigentes regionales. En el natural reparto de papeles durante las intervenciones públicas, los dirigentes andaluces y consejeros se vuelcan en "poner en valor" la gestión de la Junta de Andalucía y en remarcar que tal o cual proyecto municipal cuenta con el apoyo de la Administración autonómica. Si Aznar saca el tema de las pensiones, los consejeros aseguran que la Junta las complementó para que fueran "dignas"; si se habla de infraestructuras, se pone el acento en el trato "discriminatorio" del Gobierno central; sin son las transferencias se recalca el "sectarismo" de Madrid para dar más competencias a la comunidad. En el PSOE sí hay una línea regional de campaña y se aprovechan todas las tribunas para lo que vendrá después, pero siempre en relación con sus candidatos municipales.

Chaves ejerce de presidente de la Junta por la mañana y por la tarde, de líder de los socialistas andaluces. Participa hasta en cuatro actos diarios no sólo en mítines sino, sobre todo, en visitas a colectivos y empresas y busca el contacto directo con la gente, mayormente con los jóvenes, algo a lo que le ha ido cogiendo gusto y que está directamente relacionado con que se siente muy seguro. El Chaves de sus primeras elecciones andaluzas, de 1990, que saludaba tímidamente, sin levantarse y con la mano floja, a un anciana votante socialista en Cartaya; o el que en 1994 no se atrevió a ir a Linares por los santaneros, no tiene nada que ver con el que día atrás entró a saludar a las dependientas de Benetton en Motril o el que ayer se empeñó en hacerse una foto con las trabajadores de una cooperativa en Lepe. El cambio no es producto de cursillos electorales ni de la experiencia ni que ha perdido timidez, sino de estado de ánimo, aseguran los que lo conocen. En lo que va de campaña apenas ha dado materia a los guionistas de Los Guiñoles, aunque el sábado en Sevilla aseguró que la Junta financiaría el AVE de "Granada a Melilla", en vez de a Bobadilla. En lo que no ha cambiado es en compartir su competencia sobre la fecha electoral: "Yo, eso, sólo lo consulto con la almohada".

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