El conductor de un todoterreno mata al joven al que perseguía tras caer por un terraplén

Gigel Lupaecu, un rumano de 21 años, murió tras ser arrollado por un todoterreno en la urbanización Arroyuelos, en el municipio serrano de Los Molinos. El vehículo iba conducido por un transportista, residente en la urbanización, que perseguía al joven al sospechar que era uno de los tres individuos que habían robado el radiocasete de un turismo que tenía aparcado ante su casa. Lupaecu cayó por un terraplén y tras él lo hizo el todoterreno, sin que pudiera evitarlo el conductor, que inicialmente fue detenido como presunto autor de homicidio por imprudencia.

Los hechos ocurrieron en torno a las 3.20 de la madrugada de ayer, cuando un todoterreno cayó por un terraplén de la calle de Molineras, de unos dos metros de desnivel y aplastó a un joven, según informaron fuentes del servicio de emergencias 112. La víctima quedó atrapada bajo el vehículo y falleció prácticamente en el acto, al presentar lesiones mortales.

Al lugar acudieron poco después una dotación de bomberos de la Comunidad, que tuvo que rescatar al muchacho de entre los bajos del todoterreno, y una UVI del Summa (Servicio de Urgencias Médicas de Madrid), cuyos facultativos sólo pudieron certificar su fallecimiento.

El dramático suceso empezó a gestarse unos minutos antes, cuando regresó a su casa el dueño de una vivienda de la calle del Ciprés, en la misma urbanización Arroyuelos. Este hombre, que iba acompañado de otras personas, observó que su coche, estacionado en la vía pública, había sido violentado y que alguien se había apoderado, entre otras cosas, del aparato de radio.

El propietario del turismo y sus acompañantes decidieron dar una batida por el complejo residencial, ante la creencia de que los ladrones pudieran seguir aún en la zona. Al cabo de unos minutos, descubrieron a tres jóvenes que les resultaron sospechosos, según Francisco Pérez Robledano, presidente de la comunidad de propietarios de la urbanización Arroyuelos.

Dos de los sospechosos echaron a correr hacia la cercana vía férrea, mientras que el tercero lo hizo en otra dirección, perseguido por el dueño del coche desvalijado. Éste conducía otro vehículo de su propiedad, un todoterreno Opel Frontera negro. En un momento dado, el joven fugitivo resbaló y cayó por un terraplén. El piloto del todoterreno también se precipitó por el terraplén, al no poder frenar a tiempo, según Pérez Robledano. El pesado vehículo aplastó al muchacho causándole la muerte en el acto. Ese paraje suele estar encharcado cuando llueve, según el vecindario.

La víctima fue identificada como Gigel Lupaecu, de 21 años, de nacionalidad rumana, que carecía de antecentes. Según las investigaciones de la Guardia Civil, el fallecido no tiene familiares en España, por lo que ha sido avisado el consulado de Rumanía en Madrid a efectos de la posible repatriación del cadáver. Las fuentes consultadas no han podido precisar si tuvo algo que ver con la sustracción de la radio.

El dueño del todoterreno, que es empresario de transportes, fue detenido como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia, según fuentes próximas a la investigación. Sin embargo, los vecinos de la urbanización en que reside afirmaron ayer tarde que esta persona, cuya identidad no ha sido facilitada, ya estaba en libertad. "Todo fue un accidente; una mala suerte", dijeron un hombre y su acompañante, que se identificaron como "familiares" del propietario del todoterreno.

El municipio de Los Molinos, con 4.000 vecinos censados, está situado en la sierra de Guadarrama, al noroeste de la Comunidad y a unos 52 kilómetros de la capital madrileña.

Pérez Robledano aseguró que la urbanización Arroyuelos, que él preside en la actualidad, viene sufriendo reiterados robos. En el municipio hay numerosos conjuntos residenciales, como Monte Pinar, Matarrubia, Majalastablas, Los Borregones, El Balcón de la Peñota y Luz Sierra, surgidos por su proximidad a la sierra.

Sobre las cinco de la madrugada de ayer, es decir, menos de dos horas después del trágico suceso en el que murió el joven Gigel Lupaecu, otro vecino de Arroyuelos descubrió que le había sido sustraído el automóvil que tenía estacionado en una calle de la urbanización. Ésta se halla en el límite del municipio de Cercedilla y está compuesta por viviendas de fin de semana y verano, lo que hace que sea una zona "proclive a sufrir asaltos", según Paloma Fraguas, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Los Molinos.

Fraguas denunció ayer la escasez de vigilancia policial en Los Molinos, debido a que los agentes del cuartel de la Guardia Civil tienen que ocuparse también de la seguridad de Collado-Mediano y otros pueblos limítrofes. Asimismo, la edil aseguró que la plantilla de la Policía Local está formada sólo por cuatro agentes.

Perece un motorista

Por otra parte, un joven de 22 años murió ayer al chocar contra un árbol la moto que conducía por la avenida del Cañal, en el municipio de Arganda del Rey. El accidente, según informó un portavoz de Emergencias 112, ocurrió hacia las 11.00 en esta vía argandeña que da acceso a un polígono industrial y una zona muy transitada por ciudadanos, que alertaron del suceso a los servicios sanitarios.

El joven, que no llevaba puesto el casco, según el portavoz del 112, chocó, por causas que aún se desconocen, contra un árbol y cayó al suelo, sufriendo un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura craneal, que le causaron la muerte prácticamente en el acto. Cuando la UVI del Summa llegó al lugar del siniestro, los facultativos nada pudieron hacer por su vida.