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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Adam Osborne, pionero del portátil

Adam Osborne, cuyos éxitos y fracasos como pionero del primer ordenador portátil se convirtieron en una de las primeras historias aleccionadoras de Silicon Valley, ha muerto a los 64 años. Osborne, inmigrante británico y residente en California durante mucho tiempo, falleció el 18 de marzo mientras dormía en Kodaikanal, India. Su muerte puso fin a su lucha de una década contra un trastorno cerebral orgánico que le hacía sufrir pequeños infartos frecuentemente.

La popularidad del ordenador portátil de 10,5 kilogramos que introdujo en 1981 hizo que la empresa que acababa de crear, Osborne Computer Corp., se convirtiera en una de las empresas informáticas de más rápido crecimiento entonces, en parte gracias a su decisión de recortar casi a la mitad los costes de los ordenadores frente a sus competidores. Pero los rigores del hipercrecimiento -término acuñado para describir el ascenso de su empresa- acabó dos años más tarde en una quiebra aún más rápida.

Un antiguo compañero le recordaba como un hombre rebosante de ideas, un ingeniero reconvertido en editor informático y después en ejecutivo informático pionero, para el que lo principal eran los conceptos, el negocio, secundario. "Era un gran emprendedor, pero no un todoterreno", recordaba Lee Felsenstein, cofundador de Osborne Computer.

Nacido en Bangkok, Tailandia, de unos padres expatriados, Osborne pasó su infancia en el sur de India. Tras estudiar en la universidad en Inglaterra, se casó y se trasladó a EE UU para trabajar como ingeniero químico. Adquirió la nacionalidad estadounidense y decidió apostar por una nueva carrera como editor técnico en los años de formación de la industria del ordenador personal.

Al ver la posibilidad de enfrentarse a Apple Computer tras su éxito inicial en 1977, Osborne se dedicó a fabricar el primer ordenador portátil comercialmente viable. En 1981, durante el primer año de la empresa, vendió el ordenador Osborne-1, que tenía el tamaño de una máquina de coser portátil, alcanzando una facturación de 5,8 millones de dólares. A finales de 1982 había vendido 10.000 unidades al mes, con unas ventas de 68,8 millones de dólares.

Después cometió el clásico error comercial. A principios de 1983, Osborne anunció a bombo y platillo una segunda generación mejorada de su producto, meses antes de que estuviera listo para su envío. Las ventas de los modelos más antiguos de sus ordenadores se desplomaron. La consiguiente acumulación de existencias llevó a la quiebra de Osborne Computer en septiembre de 1983. "Su entusiasmo por el nuevo producto le hacía incapaz de mantener el secreto", recordaba Flesenstein.

Compaq Computer Corp., que ahora forma parte de Hewlett-Packard Co., tomó el testigo de Osborne cuando en 1983 Compaq introdujo su primer producto, un ordenador portátil. Impávido ante el fracaso de su empresa, en 1984 Osborne publicó unas memorias tituladas Hipercrecimiento. Después se lanzó a una nueva aventura denominada Paperback Software, basada en la idea de que los programas informáticos podían venderse como los libros de bolsillo. Aquella empresa quedó encallada cuando Paperback fue demandada por su competidora, Lotus Development Corp., en un famoso proceso en el que se alegaba que la hoja de cálculo de Paperback recordaba demasiado al programa 1-2-3 de Lotus. Osborne y Paperback separaron sus rumbos en 1990.

La salud de Osborne comenzó a declinar en 1992, obligándole a trasladarse a India para vivir con su hermana Katya.

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