PNV y EA siguen sin firmar su pacto de coalición un mes después

El PNV y Eusko Alkartasuna siguen sin resolver sus diferencias para cerrar los flecos y firmar definitivamente el acuerdo de coalición electoral para las próximas municipales. Este compromiso se alcanzó el 30 de enero ante la presión del lehendakari, quien reunió a los negociadores de ambos partidos en el palacio presidencial de Ajuria Enea en una maratoniana sesión de dieciséis horas, hasta que acordaron formar coalición para 123 municipios del País Vasco y Navarra, así como para el Parlamento navarro y las Juntas Generales de los tres territorios de Euskadi.

La presidenta de EA, Begoña Errazti, acusó ayer al PNV de "dar marcha atrás" en sus compromisos adquiridos para culminar la coalición con la rúbrica de ambos presidentes, protocolo que aún no se ha producido. Errazti precisó que el PNV no acepta ahora que cada partido pueda formar un grupo propio en las instituciones, una fórmula que permitiría a EA, la formación más débil, mantener voz propia en los ayuntamientos y Juntas Generales donde no encabeza las listas electorales.La presidenta de EA, Begoña Errazti, acusó ayer al PNV de ser responsable del bloqueo en que se encuentra el pacto de coalición que los dos presidentes aún no han firmado, a pesar de que faltan menos de tres meses para la cita electoral. Errazti señaló que el partido de Arzalluz ha dado "marcha atrás" en el compromiso cerrado el 28 de enero en Ajuria Enea por los negociadores y "no acepta ahora" la posibilidad de que cada partido pueda tener su representación y formar su propio grupo juntero o municipal, pese a presentarse a los comicios en coalición.

Según la presidenta de EA, este paso es fundamental para que cada partido mantenga "una voz autónoma en las instituciones". Lo cierto es que, salvo en Navarra y, sobre todo, en Guipúzcoa, donde EA tiene una más fuerte presencia social e institucional -encabeza la lista en 14 municipios de los 54 donde van coaligados, y aún quedan seis por decidir- el partido de Errazti tiene muy limitada su capacidad de alcanzar alcaldías y tener portavoces cualificados en las instituciones locales y forales. Este temor ha sido precisamente uno de los factores que ha dificultado la negociación aún por culminar.

Tras la celebración ayer de la asamblea nacional destinada a analizar la negociación con el PNV, la presidenta de EA insistió en que "el PNV tiene la pelota en su tejado, pues ha dado marcha atrás en un aspecto fundamental". Errazti no hizo mención a cómo se han resuelto los problemas internos que el acuerdo alcanzado en enero ha creado en el seno de su partido, especialmente en varios de los municipios de Vizcaya que se han resistido a la coalición.

La secretaria del EBB, Josune Ariztondo salió al paso de las acusaciones de Errasti y afirmó "no entender" a qué se refiere cuando afirma que su partido ha dado "marcha atrás". "EA sabe perfectamente que por parte del PNV tiene la garantía de que va a tener voz propia y grupo de partido en todas las instituciones en las que es posible, en las Juntas Generales", aseguró Ariztondo, pero no mencionó los ayuntamientos, que se rigen por su propio reglamento.