_
_
_
_

Flamenco, un remedio contra la guerra

"No habría guerras si todo el mundo bailara flamenco". Con estas palabras se expresó Joaquín Cortés al intentar contagiar a los británicos su pasión por el arte gitano. "Es la mejor forma de evadirse de todas las penas que nos rodean. Todas las personas deberían dejarse llevar por su ritmo y así no habría tantos problemas en el mundo", explicó a Cherlie Methven, de The Daily Telegraph. Desafortunadamente, el artista cordobés no pudo llevar a la práctica su consejo. Canceló a última hora su anticipada actuación de Londres aquejado, según unos, por dolencias de espalda, y, según otros, por una insólita alergia a la sala Hammersmith Apollo, donde estaba previsto la puesta en escena de su espectáculo Life. "Es un local demasiado cutre para Joaquín", señaló ayer su representante en Londres. El bailarín no parecía muy afectado de defraudar al público y aprovechó su estancia en la capital para promover su último DVD y asistir a las fiestas con motivo de la Semana de la Moda.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_