_
_
_
_
_
MERCADOS

Estable, dentro de la gravedad

Las turbulencias políticas y económicas apenas causan impacto

La Bolsa termina la semana con ganancias gracias a las rentas acumuladas en las primeras sesiones, cuando parecía posible una solución razonable al conflicto con Irak, y a pesar de la persistente debilidad económica. El Ibex 35 cierra con una subida del 1,18%, por encima de los 6.000 puntos.

La situación en los mercados de valores permanece relativamente estable, con los precios más cerca de posiciones de compra que de venta, pero con una creciente dosis de inestabilidad que frena cualquier toma de decisiones. La incertidumbre geopolítica y la creciente debilidad económica actúan al unísono en contra de los mercados, pero a pesar de ello los índices terminan la semana al alza.

El Ibex 35 gana el 1,18% y el índice general de la Bolsa de Madrid el 0,99%, en parte debido a las rentas acumuladas en las primeras sesiones de la semana, cuando la posibilidad de una resolución pacífica en el conflicto entre Estados Unidos e Irak parecía contar con más opciones.

Las dos primeras jornadas aportaron una subida del 3,22% al Ibex 35 gracias al apoyo global a una solución pacífica al conflicto con Irak, pero la reacción de la Administración estadounidense diluyó en buena parte esa posibilidad y los mercados volvieron a descontar las tensiones, esta vez con nuevos elementos a tener en cuenta.

La incertidumbre geopolítica está frenando aun más la economía y el instituto alemán Ifo revisó a la baja las expectativas de crecimiento del PIB alemán para este año, cifrándolas ahora en el 0,9%. Estas estimaciones coinciden con las presentadas semanas atrás por la Comisión Europea para este primer trimestre, en el que no se descartaba la entrada de la economía de la eurozona en recesión.

Los inversores han asistido en estos días a la presentación de numerosos informes sobre los posibles impactos de una guerra sobre las maltrechas economías occidentales, lo que justifica la caída de la contratación hasta los niveles mínimos del año, al menos en la Bolsa española.

Las perspectivas que manejan los analistas pasan siempre por la posibilidad de una guerra, más o menos rápida, y de sus repercusiones. Por el momento, los inversores cuentan con nuevas revisiones a la baja en las perspectivas de crecimiento que, lógicamente afectarán a los resultados empresariales, aunque las grandes sociedades del Ibex 35 ofrecerán un ejercicio brillante al compararlo con los datos del año pasado, en el que las provisiones pasaron una elevada factura.

En Estados Unidos se conocieron algunos datos económicos que enfrían en parte los apuntes de recuperación y que, en cualquier caso, van a convertirla en mucho más irregular. El creciente déficit comercial, el tirón de los precios al consumo y la debilidad económica son factores que no invitan a tomar posiciones, sobre todo si además pesa en el ambiente el riesgo de un conflicto bélico, por corto o espectacular que sea.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_