Un partido sin ángel

Vuelven a pintar negras para el Málaga, que tendrá que jugarse en Atenas su suerte. Los dos equipos siguen invictos tras un partido muy desangelado en el que nisiquiera hubo ambiente -La Rosaleda apenas registró media entrada- y en el que el Málaga fue absolutamente incapaz de encontrar la vía del gol.

El AEK se mostró muy conformista y se dedicó a contemporizar sin mostrar un interés por el gol. Engañó en los inicios, porque quiso el balón y lo trasladó con el buen criterio que aportan jugadores como Lakis, Maladenis o Nikoladis. Pero el empeño apenas le duró 10 minutos.

El Málaga tuvo el balón y mucho terreno para moverlo, pero no hurgó lo suficiente en el flanco más débil de la maraña griega, los laterales. Por el centro la defensa del AEK se mostró impenetrable. Sólo una vez Dely encontró desmarcado a Darío, pero el lanzamiento de éste salió demasiado cruzado (m. 30). Los dos delanteros malagusitas siempre estuvieron en inferioridad ante los tres centrales del AEK. El uruguayo, muy mermado físicamente, vio una tarjeta amarilla que le impedirá jugar la vuelta.

En las pocas ocasiones en las que el AEK se atrevió a salir de la cueva, no mostró ningún afán aventurero. Tocaba y tocaba, siempre en horizontal o para atrás, hasta perder el balón. Pero cuando osó lanzar algún contragolpe resultó que a punto estuvo de obtener petróleo, pero Contreras salvó a su equipo con un paradón a disparo de Borbokis (m. 53) y en un mano a mano con Lakis (m.55). Ahí quemó sus armas. La historia del primer tiempo se volvió a repetir y el partido se diluyó hasta quedar congelado entre la impotencia del Málaga y el conformismo del AEK.

Otros partidos de esta ronda: Slavia Praga (Rep. Che.), 1; Besiktas (Tur.), 0. Panathinaikos (Gre.), 3; Anderlecht (Bél.), 0. Herta (Ale.); Boavista (Por.), 2. Lazio (Ita.), 3; Wisla (Pol.), 3. Auxerre (Fra.), 0; Liverpool (Ing.), 1. Celtic (Esc.), 3; Stuttgart (Ale.), 1.