"A Aimar le digo que no se pare"

El público de Mestalla valora el lustre que Rafa Benítez da al Valencia en su segunda temporada al frente del equipo, pero una de sus decisiones no la acaba de entender. ¿Por qué Aimar es el jugador más sustituido? "Porque tiene características especiales", responde el entrenador madrileño, de 42 años, que se sienta esta noche por primera vez en el banquillo del estadio Olímpico de Roma para medirse al cuadro de Fabio Capello (20.45-TVE 1), que afronta el partido sin algunos de sus mejores jugadores, entre ellos su alma, Totti, martirizado por una serie de dolencias musculares. Tampoco estarán Emerson, Candela, Samuel, Dacourt y Marazzina.

"Aunque estamos trabajando para que sea un segundo delantero, Aimar no deja de ser un enganche clásico argentino, con dos hombres por delante y muchísima libertad. Conseguir que Pablo se adapte al fútbol europeo no es fácil. Su intensidad de juego es muy alta y, al final de los partidos, lo puede notar. Aunque le duela mucho que lo cambies, no te queda más remedio si al equipo le falta el gol y él está cansado. Él piensa más rápido que los demás en movimiento y por eso le digo que no se pare mientras juega", explica Benítez. Dicho esto, ¿por qué no prueba con dos delanteros por delante de Aimar? "Porque para eso debes tener dos volantes a su lado que jueguen por dentro y por fuera y aquí es difícil encontrarlos. Los nuestros [Vicente y Rufete] son más exteriores".

"En Italia se han pasado con los análisis tácticos y les ha faltado trabajar el fútbol ofensivo"

Por no haber sido un futbolista de élite, Benítez siente que debe demostrar el doble para que se le reconozca la mitad. De ahí, que se haya empeñado en evolucionar día a día: está suscrito a una decena de revistas: Don Balón Chile, Don Balón Perú, Don Balón México, Olé, Training Football, Placard... "Y sigo muchos libros sobre estadísticas de jugadores", advierte. De lo mucho que ha leído destaca un libro, Dinámica de lo impensado, del periodista argentino Dante Panzeri, "una visión distinta del fútbol", un referente para varias generaciones de técnicos. "Creo que hay un término medio entre el fútbol estético y el resultadista. Se puede jugar muy bien en corto y en largo, pero lo importante es saber cuándo hacerlo", comenta.

Sin embargo, se le ha acusado frecuentemente de jugar a la italiana. ¿Le molesta? "Eso parte de la ignorancia de quien hace esa evaluación peyorativa. Los italianos tienen muy buenos conceptos defensivos. He estudiado allí, pero también en Inglaterra, Estados Unidos, Holanda...Yo soy un enamorado del fútbol holandés con tres puntas, pero hay que tener jugadores de esas características: dos hombres de banda tipo Overmars y un delantero con muy buenos movimientos. Eso requeriría muchísimo más trabajo defensivo". ¿A qué se debe, pues, la crisis del calcio? "Se han pasado en los análisis tácticos y les ha faltado pasar sus análisis defensivos a los ofensivos", razona.

Sería interesante saber si el Valencia, sin Carew, atacaría de manera diferente. "Albelda, Baraja y Aimar, por el centro, han dado un gran rendimiento al equipo y condicionan todo lo demás. Marcan el estilo", indica Benítez. O sea, ¿no le valdría un delantero de área como Batistuta? "Tendríamos que cambiar a algunos jugadores e ir modificando cosas alrededor", sugiere.

Benítez afirma que, objetivamente, su equipo está mejor que a estas alturas del curso pasado: "Mejor en datos físicos y médicos, aunque ahora hemos tenido lesiones de dos o tres meses y eso ha cargado a otros jugadores". En todo caso, no se cuelga todas las medallas, sino que resalta la personalidad de algunos de sus jugadores: "En Holanda ya hicimos una valoración muy buena de Aimar, a nivel técnico y humano; a Baraja ya lo conocimos de Valladolid; Carboni, Ayala, Pellegrino, Djukic, Cañizares, Palop... Una serie de jugadores que, cuando los vas conociendo, te das cuenta de que son la clave de un Valencia que durante cinco años ha estado a un gran nivel. Los que llegan se van contagiando: eso es lo que hace que el Valencia sea fuerte".

Al perfeccionista Benítez le queda aún tiempo para ver el fútbol desde una perspectiva lúdica. "El otro día vi a una chica haciendo golpeos del balón y una volea y me paré a mirarla. Son cosas que llevas innatas. Desde los seis años estoy dando patadas a un balón permanentemente. Pero, como espectador puro y duro, es imposible que vea un partido. Siempre hay algún análisis".

Análisis que llegan a ser difíciles de compaginar con su reciente paternidad. "Tengo dos niñas, una de cuatro años y la otra de tres meses. Y lo llevo con dificultades porque, por los viajes, no les puedo dedicar el tiempo que quisiera. Con la mayor tengo una pelea porque quiere que apague los vídeos que pongo de fútbol", concluye.

Roma: Pelizzoli; Panucci, Aldair, Dellas, Lima; Cafú, Tomassi, De Rossi, Delvecchhio; Cassano y Montella.

Valencia: Cañizares; Révellière, Ayala,Pellegrino, Carboni; Rufete, Albelda, Baraja, Vicente; Aimar; y Carew.