Unas candidaturas sin efecto Zapatero

Joan Ignasi Pla, secretario general del PSPV-PSOE, "no es rehén de nadie, pero tampoco puede hacer todo lo que quiere", opinaba ayer un dirigente socialista valenciano del proceso de confección de candidaturas con las que el partido se presenta a los comicios del próximo 25 mayo.

El pasado fin de semana, el secretario de Economía del PSOE, Jordi Sevilla, -y lo ha repetido días después en Castellón- lanzaba un claro mensaje a Pla, ante los 300 militantes que participaban en una convención política en Alicante, que las candidaturas no debían ser la suma de las diferentes familias del socialismo valenciano y mucho menos de una de ellas, apuntando hacia el lermismo, la que se visualiza como más cohesionada. Sevilla recordaba que la obligación del partido era confeccionar unas listas ilusionantes que llegaran al electorado, unas candidaturas para ganar las elecciones, en línea con el proyecto renovador que ha impulsado el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero.

Las listas locales se cierran en siete días y las autonómicas, a mediados de febrero

La compleja situación en Valencia y Alicante dificulta la entrada de nuevos activos sociales

En el patio de butacas, donde estaba sentado Pla, el gesto de Sevilla no gustó. No era ni el momento ni el lugar ni tampoco la forma, si bien una parte de los asistentes entendió el fondo del mensaje. Y es que en el proceso de elaboración de candidaduras, que afronta estos días su recta final -las candidaturas municipales se cierran en siete días, y las autonómicas a mediados de febrero-, se ha extendido la sensación de que el lermismo está sobrerepresentado. Una percepción a la que no ha ayudado un borrador de lista autonómica, que ha circulado por alguna agrupación local, copada en sus primeros puestos por lermistas. "Se hace con la intención de condicionar la capacidad de actuación de Joan Ignasi Pla", agrega otro dirigente del partido, que recuerda que desde el congreso de Alicante, en septiembre de 2000, en el que Pla salió elegido secretario general del PSPV, se ha realizado un esfuerzo por que se disuelvan todas las corrientes del socialismo y en este escenario, la lermista es la más visible y cohesionada. "La integración es la que manda y desde luego no puede ser sectaria", agrega.

Tras las manifestaciones del secretario de Economía del PSOE, Pla ha asegurado que dispone de total autonomía para componer una candidatura realista, que le garantice la paz orgánica, aunque con escasas nuevas incorporaciones. El empeño del dirigente socialista por poner en práctica la paridad o las listas cremallera (50% hombres y 50% mujeres) también complica la elaboración de listas.

La dirección federal del PSOE está preocupada por el cartel electoral de dos plazas, las ciudades de Valencia y Madrid, donde se juega buena parte de la recuperación electoral de cara a las generales de 2004. Un ejemplo del interés creciente del federal por Valencia es la celebración hoy en esta ciudad de la Convención Municipal, en la que los alcaldes socialistas de España y los candidatos a serlo debatirán el modelo municipal que postula el partido.

El plus electoral

Pero la candidatura de Valencia, que se cerrará el 5 de febrero está alejada de las que se están elaborando en otras grandes ciudades como Madrid. "Tú comparas la lista municipal de Madrid, cómo está confeccionada y qué perfil tienen los candidatos [con la de Valencia] y te preguntas ¿dónde está el plus?", observa un militante socialista. En Valencia, el candidato Rafael Rubio está a distancia de su competidora, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que gobierna la ciudad desde 1991. Además, Rubio está elaborando una lista, en la que, de momento, se ha barrido al equipo de Ana Noguera después de derrotarla en primarias y los puestos se reparten entre personas de la confianza del vicesecretario general del PSPV, José Luis Ábalos y de Rubio, y en menor medida de la FSP-UGT y los lermistas. Pla cuenta con un puesto.

El panorama en Alicante tampoco está despejado. Blas Bernal, vencedor en las primarias con un 52% de los votos, y Ángel Franco negocian con la renovadora Carmen Sánchez Brufal, una candidatura de integración a siete días de su aprobación. Es el pez que se muerde la cola. La compleja situación orgánica en ambas agrupaciones dificultan, por otro lado, que nuevos activos sociales se sumen al proyecto.

En Madrid, la candidata Trinidad Jiménez, ha incorporado a su lista a Enrique Barón, presidente del Grupo Socialista Europeo, a la ginecóloga Elena Arnedo, al presidente de la Federación de Gays y Lesbianas, Pedro Zerolo, o a Pilar Estébanez, presidenta de Médicos del Mundo.