"Mi trabajo ha sido extraordinario"

Las tres derrotas consecutivas cosechadas por el Rayo en Vallecas - frente al Sevilla, el Mallorca y el Valladolid- se han llevado por delante a Fernando Vázquez, quien, al mediodía de ayer, dejó de ser el entrenador del conjunto franjirrojo. Así lo decidió José María Ruiz-Mateos, el dueño del club, a primera hora de la mañana. Su esposa, Teresa Rivera, la presidenta, acudió al estadio para comunicar personalmente la noticia al afectado. El Rayo busca nuevo técnico y el mejor situado en la lista de preferencias es el argentino Óscar Ruggeri, con quien ya ha comenzado a negociar.

La destitución de Vázquez venía fraguándose desde hace más de mes y medio, concretamente desde la derrota (3-1) del equipo frente al Espanyol, en Montjuïc, el 1 de diciembre. La directiva rayista ya decidió entonces despedirle. Sin embargo, se encontró con la negativa del técnico elegido para relevarle, Julen Lopetegui, con quien se reunió el propio Ruiz-Mateos. Lopetegui, que tiene contrato con la Federación Española como ayudante del seleccionador, Iñaki Sáez, le dijo "no" al club rayista al no poder romper aquel compromiso. Ante la reacción de la plantilla en defensa de Vázquez, los responsables del club mantuvieron una reunión con los capitanes en la que éstos les hicieron saber su opinión: "Si viene Julen [compañero suyo hasta el año pasado], maravilloso. Si no, que siga Vázquez".

No llegó Lopetegui y siguió Vázquez. La inmediata victoria sobre el Barça (1-0) atemperó los ánimos. Se sucedieron los triunfos fuera de casa y las derrotas en ella. Y el domingo, en Vallecas, donde ganó el Valladolid, se vieron en la grada los primeros pañuelos en señal de protesta.

Los dueños del club decidieron ayer tomar medidas. "No tenemos que agonizar para adoptar una solución y es mejor actuar cuando aún tenemos vida. Era una apuesta muy arriesgada seguir con Vázquez", explicó Álvaro Ruiz-Mateos, el director general; "lo del domingo fue horrible. Siempre cogemos tarde el tren. La credibilidad la dan los resultados y si éstos no llegan se pierde la confianza".

Se le recordó al hijo de Ruiz-Mateos que el Rayo, todavía en puestos de descenso, ha cosechado 18 puntos, a sólo dos de la salvación. Aún más: la pasada temporada, a estas alturas, era el colista y tenía seis puntos menos. Y se acabó salvando. "Es cierto", contestó el director general; "pero el año pasado se hizo una segunda vuelta espectacular que no se va a repetir en éste".

Sin embargo, Vázquez no comparte las dotes adivinatorias de quien hasta ayer fue su jefe. El técnico se presentó mediada la tarde ante los medios de comunicación. Con gesto apesadumbrado, dijo estar seguro de que no existen motivo deportivos para su destitución.

"Ha sido una decisión poco responsable y no es la mejor para el equipo", dijo el técnico gallego antes de sentenciar: "Mi trabajo de estos seis meses en el Rayo ha sido extraordinario".

Esta vez la directiva del club no ha hecho ningún acercamiento a Lopetegui, más que nada porque sabe que su respuesta sería la misma que hace mes y medio. Entre los nombres que se barajan para ocupar el banquillo el preferido es el de Ruggeri, histórico defensa argentino que en España jugó en el Logroñes y el Madrid. Como entrenador, Ruggeri ha dirigido al San Lorenzo de su país y al Guadalajara, mexicano. Él ya conoce la oferta del Rayo y hoy decidirá si regresa o no al fútbol español.