_
_
_
_
_

Camps esgrime un discurso triunfalista para cerrar 2002 y ensalza de nuevo a Zaplana

El candidato popular a la Presidencia de la Generalitat, Francisco Camps, esgrimió ayer un discurso triunfalista para realizar una valoración política del año. Con un guión sin medias tintas, sólo de buenos y malos, Camps presentó la gestión del Partido Popular en la Comunidad Valenciana como un rosario de logros frente al principal partido de la oposición, el socialista, al que presentó casi como una reedición de las siete plagas de Egipto.

Francisco Camps fue tajante: "Para el PP ha sido un gran año. Todos los retos que nos pusimos se van cumpliendo. Los datos avalan que podemos seguir teniendo confianza y autoestima". A partir de esta declaración de principios, el candidato del PP a la Presidencia de la Generalitat enumeró que el crecimiento autonómico había sido superior a la media española, que se han creado 32.000 empleos, 11.000 empresas, que la Comunidad Valenciana es la segunda región exportadora, que la sanidad va como nunca, igual que las políticas de bienestar social, el AVE o el PHN. En su intervención, Camps elogió varias veces a su presidente regional en el partido y ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, de quien dijo que "es uno de los líderes del partido con mayor proyección". Un PP que está "más unido que nunca" frente a un Partido Socialista que es está en contra del agua, de la calidad de la enseñanza, del modelo territorial de España, del AVE, de la lengua y de otros temas importantes.

El PSPV, a través de su vicesecretario José Luis Ábalos, presentó a través de un comunicado el negativo de la foto elaborada por Camps. Donde todo era blanco o negro, pero visto desde el punto de vista socialista.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_