Ronaldo llegó a tiempo; Ronaldinho, no

Las sospechas de impuntualidad apuntaban a Ronaldo, el del Madrid. Pero Ronaldo llegó a su hora y en su día, ayer, junto a Flavio y Roberto Carlos. Este año el papel de brasileño tardón, ese clásico navideño, le correspondió a Ronaldinho Gaucho. La plantilla del Paris Saint Germain, después de una semana de vacaciones navideñas, regresó ayer al trabajo. Uno, dos, tres,...¿Estamos todos?, ¿falta alguien? Sí, faltaban hasta cinco jugadores. Entre ellos, el brasileño Ronaldo de Assis Moreira (Portoalegre, 1980), que decidió de forma unilateral prolongar su estancia en su país al menos hasta el próximo 2 de enero. Lo último que se supo de él fue una breve felicitación: "Feliz Navidad", colgada de su página web el pasado 25 de diciembre.

El club parisino, que entrena Luis Fernández, hizo público un comunicado en el que trata de dar respuestas a los interrogantes surgidos por la ausencia del brasileño. "No ha venido por iniciativa propia. No tiene justificación médica. Si había un problema sanitario, aquí hay un equipo competente que lo hubiese solucionado". El mediapunta arrastra problemas en su dentadura y en las vías respiratorias.

El club parisino espera las explicaciones del jugador. Si éstas no son convincentes será sancionado. También aguarda las escusas de los otros ausentes: Llacer, Heinze, Andre Luiz y El Karkouri. El presidente del club, Laurent Perpere, dio una versión de los hechos ligeramente distante de la oficial y aseguró que Ronaldinho "tenía que realizar una consulta médica en Brasil". "Se había fijado una fecha para reanudar los entrenamientos", es la versión de Luis Fernández, el técnico, "aunque algunos no han podido acudir por problemas en los horarios de los aviones".

El año pasado fue Rochemback, del Barcelona, el brasileño que dejó plantado a su equipo tras el parón navideño. Este año, el madridista Ronaldo, sobre el que planeaba la duda, no sólo llegó puntual a la cita, sino que además aseguró a su llegada al aeropuerto de Barajas que no pensaba "pedir un permiso especial para poder asistir al carnaval de Rio de Janeiro". Otro clásico, pero éste, de febrero.