El consejo de Áurea somete mañana a aprobación la fusión con Acesa

El Consejo de Administración de Áurea se reunirá mañana con el objetivo de aprobar el proyecto de fusión con Acesa, siete meses después de que ambas concesionarias anunciaran la unión del negocio de sus autopistas, según fuentes cercanas a la compañía. A falta del sí definitivo de Acesa, todo apunta a que la integración de las compañías se materializará finalmente pese las dudas surgidas en las últimas semanas.

La fusión de Acesa y Áurea, cuyo anuncio zanjó la llamada guerra de las autopistas, acumula un retraso considerable. La operación, que debería de haberse cerrado en octubre, topó desde el principio con el temor que albergaban los accionistas minoritarios de Áurea, controlada por el grupo de la construcción Dragados, a perder peso en la empresa resultante, que se convertirá en el tercer operador europeo del sector.

La aprobación del proyecto por parte de Áurea daría, sin duda, un empujón determinante a la fusión, que a principios de mes llegó a ser cuestionada por Isidre Fainé, presidente de Acesa Infraestructuras, que tiene a La Caixa como accionista de referencia. "Cabe el riesgo de que no salga la fusión", advirtió el también director general de la entidad financiera catalana durante la junta de accionistas de Acesa.

"Si cambiamos nuestra manera de pensar, será porque es mejor para el accionista", aseguró Fainé. El Consejo de Administración de Acesa dio el visto bueno a los términos para la unión con Áurea poco después de que se anunciara la operación, el 20 de mayo pasado. Pero la cúpula de la concesionaria controlada por La Caixa tampoco ha aprobado todavía de forma definitiva el proyecto con la relación de canje de la fusión, que en su día se fijó en 2,06 acciones de Acesa por cada acción de Áurea.

Reunión de Acesa

Según establece el reglamento mercantil, los proyectos de fusión entre compañías deben ser aprobados por los consejos de forma paralela. Un precepto que deja abierta la posibilidad de que la cúpula de Acesa también pudiera reunirse mañana o el viernes para aprobar el proyecto. Fuentes de Acesa, no obstante, ni confirmaron ni desmintieron ayer este punto.

La empresa resultante de la fusión controlaría el 69% del mapa español de autopistas. Según la relación de canje pactada por Dragados y La Caixa, las cajas de ahorros valencianas Bancaja y CAM, y la andaluza Unicaja pasarían de más del 21% al 7,1% del capital. Según lo pactado, Dragados, con un 36% de las acciones, vería diluir su peso a un 12,2%. En este tiempo, las cajas y Dragados han estudiado la sindicación de acciones. Cuando se anunció la fusión, La Caixa ya superaba el 21% de la entidad resultante.

El anuncio de la fusión de Acesa y Áurea también provocó cierto malestar político en Valencia, donde no se recibió con mucho agrado que la empresa resultante de la fusión (absorción de Áurea por Acesa), con unos fondos propios superiores a 3.000 millones de euros, un beneficio neto de 300 millones y responsable de la gestión de más de 1.600 kilómetros de autopistas, estaría en Barcelona, con La Caixa, al timón.