La izquierda reprocha a CiU y el PP que oculten sus negociaciones y simulen un distanciamiento
El secretismo de la reunión de los ministros Rato y Montoro con los consejeros Artur Mas y Francesc Homs ha confirmado a la oposición catalana en su convicción de que los intentos de marcar distancias entre CiU y el PP no son más que 'teatro'. Los portavoces de los tres grupos parlamentarios de la izquierda salieron ayer en tromba para criticar que mientras que en Barcelona Mas sostiene que presentará al Parlament un proyecto de presupuestos para 2003 sin pactarlo con ningún otro grupo, en Madrid negocie acuerdos secretos con el Gobierno del PP.
El portavoz parlamentario del PSC-Ciutadans pel Canvi, Joaquim Nadal, acusó al Gobierno catalán de 'mentir', simplemente, en el esfuerzo para ocultar su alianza con el PP. 'Nos tienen acostumbrados a la comedia, pero esto es ya la mentira', criticó. La única diferencia que anotó respecto a los seis años en los que el Gobierno de CiU lleva aprobando los presupuestos de la Generalitat con el apoyo del PP es que esta vez lo han hecho de manera que calificó de 'vodevilesca'.
En términos muy parecidos se expresó el portavoz de Esquerra Republicana (ERC), Josep Huguet. 'Que dejen de hacer comedia, porque esto ya no tiene ni la categoría de teatro de aficionados'. Los republicanos han acogido con escepticismo la afirmación de CiU de que presentará unos presupuestos aceptables para ERC. Por si fuera cierto, no obstante, Huguet anunció que su partido presentará una batería de enmiendas destinada a conseguir inversiones en los municipios donde participa en el gobierno municipal o tiene alcalde.
Esto es lo que en los últimos años ha hecho también el grupo parlamentario del PP a cambio de votar los presupuestos de CiU. Huguet dijo que 'la prueba del nueve' de la alianza CiU-PP sobre los presupuestos será, por lo que respecta a ERC, el rechazo o la aprobación de estas enmiendas.
El diputado Joan Boada, portavoz de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), lamentó el 'espectáculo' ofrecido por CiU y el PP al insistir en la negación del acuerdo que tan sólidamente les une. Criticó que algunos dirigentes del PP se atrevan a hablar incluso de reclamar a Pujol que presente una moción de confianza si el presidente persiste en dejar el timón del Gobierno en manos de Artur Mas. 'No hay moción de confianza mayor que la votación de los presupuestos', afirmó, dando por hecho que los votos conjuntos de CiU y el PP serán los que aprobarán los presupuestos para 2003.
El descubrimiento de la reunión secreta de CiU y el PP en Madrid significó, en cambio, una sorpresa muy desagradable para la dirección del PP catalán. Nadie sabía nada acerca de la reunión en Madrid. Y ayer algunos de sus dirigentes señalaban disgustados que, aunque se da por supuesto que existe una relación muy fluida entre ambos gobiernos y entre las cúpulas de los partidos, es de lamentar que se haya ignorado la existencia de 'una nueva interlocución para las cosas de Cataluña' surgida en el reciente congreso del partido. Se suponía que la sustitución de Alberto Fernández Díaz como presidente del PP catalán por el ministro Josep Piqué iba a situar a la organización regional del PP en un plano político cualitativamente superior. Este incidente a venido a mostrar una vez más que tanto para CiU como para el PP lo decisivo son las relaciones directas entre gobiernos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.