Un aprobado casi general

La Comisión Europea ha recomendado admitir a 10 países en la UE en el año 2004, a fin de eliminar las últimas barreras a una Europa unida. Diez años después de la caída del comunismo, Bruselas piensa que estos países tienen la fortaleza económica y la estabilidad política requeridas para competir con las empresas occidentales y, más adelante, para adoptar el euro.

Trece eran los países candidatos a ingresar en la UE, pero sólo 10 han obtenido la luz verde de Bruselas: Polonia, Hungría, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Lituania, Letonia, Estonia y las islas de Chipre y Malta. Bulgaria y Rumania podrían estar listas para el año 2007, mientras que Turquía, eterna candidata desde 1999, deberá avanzar en su proceso hacia la democracia para optar a la entrada.

El aumento de la UE a 25 miembros con 450 millones de consumidores, en todo caso, no está libre de problemas. Los electores irlandeses podrían volver a vetar el tratado de Niza, que posibilita la extensión, en el referéndum del próximo día 19 y, además, los líderes de la UE y de Europa del Este necesitan solucionar sus diferencias sobre los subsidios agrícolas y regionales.

'Si el tratado es rechazado en Irlanda de nuevo, no sé cómo podremos continuar con la extensión', señala el comisario de Extensión, Guenter Verheugen. 'Ni siquiera sé si podemos continuar'.

El informe de Bruselas no oculta todo un rosario de críticas hacia los candidatos aceptados: todos deben mejorar sus sistemas de atención médica, establecer un servicio de funciones públicas más eficaz y combatir la corrupción en la vida pública y privada. Además, se hace hincapié en la debilidad económica de los futuros miembros: la producción económica por persona en estos países ha sido de 39% del promedio de la UE durante cinco años y sólo una región del Este, el área metropolitana de Praga, supera a la UE, con una producción per cápita del 122% del promedio.

'No tomo las sugerencias de la UE sobre todo lo que necesita hacerse todavía como crítica a Polonia', se defiende Danuta Huebner, ministro de Integración a la UE de Polonia. 'Personalmente pienso que es más bien un elemento de estímulo'.

La Comisión anunció que publicará otro informe sobre el progreso logrado por los países del Este seis meses antes de la fecha de ingreso, cuestionando la oportunidad de lo que Verheugen llamó 'el proyecto más difícil en la historia de la UE'. Verheugen, cumpliendo promesas anteriores de la UE, dijo que la meta es que los nuevos miembros entren a tiempo para las elecciones parlamentarias de junio de 2004, no necesariamente en enero de ese año.

La extensión le sumará a la UE unos 74 millones de habitantes de una región que se liberó del dominio soviético en 1989, formó economías de mercado y atrajo inversiones por miles de millones de dólares de compañías como Volkswagen, Deutsche Telekom y France Télécom. Pero ahora la atención se centrará en la agricultura y el coste de los países de Europa del Este en el presupuesto de la UE, de 96.000 millones de euros.

Polonia está encabezando la oposición a los planes de la UE de negarles a los nuevos miembros el acceso total a los programas de apoyo agrícola de la UE durante los 10 años posteriores a su ingreso. Un indicador de la magnitud de esta medida es que Polonia, con una décima parte de la población de la UE, tiene más vacas lecheras que todos los 15 miembros actuales de la UE. El programa de apoyos agrícolas graduales tiene el propósito de mitigar los temores en Alemania, Suecia y otros países ricos de la UE sobre el coste de admitir a países más pobres en un momento de desaceleración económica y restricciones a los presupuestos gubernamentales.