Los banquillos se balcanizan
Imbroda y el debutante Paco Olmos desafían la supremacía de los técnicos yugoslavos
Sólo se echa en falta a Zeljko Obradovic, el pentacampeón europeo, técnico del Panathinaikos. Y como mucho, a Dusan Ivkovic (CSKA Moscú) o Dragan Sakota (AEK de Atenas). El resto de los grandes entrenadores yugoslavos trabajan en España. Son los dominadores, no hay duda. Es cuestión de currículo. Por eso, la mayoría de los aspirantes a ganar la Liga tienen a algún balcánico en su banquillo. Dusko Ivanovic en el Tau, Bozidar Maljkovic en el Unicaja y Svetislav Pesic en el Barcelona dirigen los tres clubes que subieron al podio la temporada pasada. Frente a ellos, sólo dos españoles: Javier Imbroda, el seleccionador nacional y entrenador del Real Madrid, y Paco Olmos, la gran apuesta del Pamesa.
Juan Roig, presidente del Pamesa, ha tomado nota del Valencia y Benítez para fichar a Olmos
Sorprendería más el caso de Olmos si no tuviera un precedente en su mismo vecindario. El Valencia de fútbol contrató hace un año a Rafa Benítez, un entrenador sin apenas bagaje en Primera División y menos aún en equipos de alto nivel. Y él lo hizo campeón de Liga. Juan Roig, presidente del Pamesa y hermano de Francisco, el ex dirigente del Valencia, copió la patente y se lanzó a la misma aventura. Encontró a su hombre en casa. Paco Olmos tiene tan sólo 32 años -es sólo ocho meses mayor que el veterano Abbio-, entrena desde que tenía 12 y ha pasado por todos los equipos inferiores de la Fonteta. Ahora, tras un periodo de formación de cinco años en equipos de las ligas EBA y LEB, vuelve a casa por la puerta grande para dirigir al mejor grupo de profesionales que nunca ha reunido el Pamesa.
Como Roig, el jefe de la sección de baloncesto del Barcelona, Salvador Alemany, también tomó nota de los movimientos ajenos. Sabe que del 9 al 11 de mayo se disputará la final a cuatro en Barcelona y quiere ganar por fin la Euroliga, una competición que le es tan esquiva. Su primera decisión fue destituir a Aíto García Reneses, dueño y señor de la sección durante 16 años. Su puesto lo ha puesto en manos de un yugoslavo, el seleccionador que logró la medalla de oro en Indianápolis. Svetislav Pesic, de 53 años, ha desarrollado su carrera entre Bosnia y Alemania, y tiene costumbre de tratar con megaestrellas. A eso va a Barcelona.
La misma misión encomendada a Pesic se le asignó a Maljkovic hace 12 años, aunque no la logró. Ahora, éste busca títulos para el Unicaja. Bozidar Maljkovic, de 50 años, no tiene nada que demostrar. Ha ganado cuatro Euroligas con tres equipos distintos (Jugoplastika, Limoges y Panathinaikos). En tres años en Málaga, ha asentado al equipo en la élite.
Su discípulo más aventajado, Dusko Ivanovic, de 45 años, tiene un currículo más breve pero concentrado. En siete años como técnicos ya suma nueve títulos. El último, la Liga ACB de la campaña pasada. El Tau ha depositado en él una confianza plena y lo ha tratado de retener con uñas y dientes. Cada verano, hay varios equipos italianos que lo quieren.
Otros problemas ha tenido el Real Madrid para atar a su entrenador, Javier Imbroda. Alrededor de él se ha desatado una polémica en el baloncesto español: ¿debe o puede compaginar el cargo de seleccionador nacional con el de preparador madridista? El asunto ha servido como excusa para que, una vez más, la federación y la ACB se enzarcen en una discusión que todavía no se ha solucionado.
Tanta revolución en los banquillos ha dejado en el paro a entrenadores ilustres, como Sergio Scariolo (destituido este verano en el Real Madrid), el propio Aíto, Luis Casimiro (ex campeón de Liga con el TDK y último técnico del Pamesa), etcétera.
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