El líder socialista promete un pacto sobre inmigración basado en el modelo francés

El líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se presta a que el Gobierno le haga 'consultas', si así lo quiere, sobre cómo abordar la inmigración pero él ya prepara su alternativa. Convencido de que ganará las elecciones de 2004, se apresta a formular 'un pacto de Estado', para el que resulta imprescindible la colaboración de autonomías, ayuntamientos, empresarios, sindicatos y ONG, que se basará en modelos ya ensayados en Europa, sobre todo en Francia, en torno a la integración educativa y laboral.

'Pediré a los ciudadanos que castiguen en las urnas a quienes usen la inmigración como arma electoral, porque es repugnante', dijo Zapatero en Las Palmas, tras entrevistarse con miembros de UGT y CC OO de Canarias y de la patronal de Gran Canaria.

Del discurso de Zapatero se desprende su poca fe en que el Gobierno acepte su oferta de pacto de Estado. 'No quiero polémicas sobre inmigración, pero sí pido a los Gobiernos central y canario que por lo menos consulten al resto de las fuerzas políticas', señaló. En la dirección socialista se asegura que el ministro del Interior, Ángel Acebes, ha mostrado su interés en conversar en breve con Zapatero sobre inmigración.

Pero Zapatero ha puesto ya en marcha un estudio, que incluye la revisión de todas las legislaciones europeas, para presentar su propia alternativa que tiene muchos elementos de la francesa, sobre todo en educación. Por ejemplo, en cada aula no debe haber más de un 20% de niños procedentes de otros países.

Especial cuidado va a tener en abordar la parte laboral pero sí se tendrá en cuenta que el mayor contingente posible acuda a las zonas de España más despobladas y con más necesidad de trabajadores. También ofrecerá la creación de una 'administración para la inmigración', que puede llegar a ser un ministerio.

La mejora de la relación con los países emisores de inmigrantes, sobre todo Marruecos, es fundamental para Zapatero. 'Con un gobierno socialista habrá mejores relaciones con Marruecos', auguró.

El líder socialista está a la espera de que la ministra de Exteriores, Ana Palacio, responda a su oferta de hace semanas para que aborde con las fuerzas parlamentarias un nuevo modelo de relaciones con el país magrebí.