Tala en Mairena
El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe ha emprendido recientemente unas 'supuestas' mejoras de la infraestructura de su red viaria, con enlosado de aceras, badenes, adecentamiento de barrios e incluso la configuración de un recinto ferial. Pues bien, todo esto ha llevado consigo la destrucción de una gran parte del Patrimonio Natural de esta ciudad. Una masiva arboleda, sana y frondosa está siendo arrancada de manera inmisericorde: Naranjos en los Alcores, palmeras frente al colegio mayor Maese Rodrigo, árboles inmensos del recinto de la feria y, ahora, la abundante arboleda de sombra de la avenida Magdalena Sofía de Barat.
Como ya se conoce, la comarca del Aljarafe sufrió una esquilmación brutal de sus arboledas cuando empezaron a construirse cientos de urbanizaciones con el boom de la Expo 92. Los que aquí hemos venido a residir hemos tenido que esperar más de 15 años para ver rebrotar nuevos árboles. Y, de nuevo, la tala indiscriminada. Aún puede verse el triste espectáculo de la citada avenida, con más de 50 árboles de una acera arrancados, a los que les seguirán los otros 50 de la acera de enfrente. ¿Razones? Los vecinos las desconocemos aunque nos las imaginamos. Es más fácil que las palas excavadoras levanten un acerado de cemento a que lo hagan los obreros con martillos neumáticos. Quizá el alcalde siempre se desplace en coche y desconocerá, que esa larga avenida es transitada mayoritariamente por niños y jóvenes camino de los colegios e institutos. La sombra frondosa de la arboleda, además de amortiguar el ruido del intenso tráfico que soporta la avenida, los protegía del calor. Con ella y un par de semáforos hubiera estado solucionado el problema y las personas protegidas. Pero eso era una solución barata y de sentido común.
