La industria abre la temporada de otoño volcada en los ordenadores portátiles
Se va a llevar mucho, entre universitarios, los modelos portátiles y ligeros, de entre 1.500 y 2.000 euros - En procesadores abundará el Pentium 4 a 2,4 GHz - El monitor plano empezará a imponerse, pese a su precio
La temporada de otoño 2002 presenta muchas novedades con vistas al último trimestre del año que, al coincidir con el comienzo de curso y el periodo de navidades, es el más importante del año.
La industria confía en que los ordenadores portátiles reactiven el mercado español. Los fabricantes han aumentado drásticamente las prestaciones de los ordenadores portátiles que pondrán a la venta en septiembre, hasta hacerlos comparables a los de sobremesa. El precio de un portátil continúa siendo casi el doble de un equipo de sobremesa, si bien tiene la ventaja de que se puede llevar y usar en cualquier sitio.
El procesador del otoño va a ser el Pentium 4 a 2,4 GHz, al haber bajado Intel su precio un 52% la semana pasada y dejarlo en 193 dólares para mayoristas. Se va a llevar tanto en ordenadores de sobremesa como en portátiles, gracias a su mínimo consumo (55 W).
La alternativa en portátiles es el Pentium 4 específico, o el P4-M, a 1,7 o 1,8 GHz, fiable y barato, cuesta menos de 200 dólares tras una rebaja del precio del 43%. Los procesadores más potentes en estos momentos son el P4 a 2,8 GHz y el P4-M a 2 GHz. Su precio es aún muy elevado, de 508 y 348 dólares, lo que hace que sólo se encuentren en las gamas de máximas prestaciones.
El cliente exigente puede adquirir un ordenador de sobremesa construido en torno al P4 2,53 GHz, con bus frontal de 533 MHz y que, como todos los P4 por encima de los 2 gigahercios y los P4-M, incorpora una memoria caché de 512 K y está fabricado con 0,13 micras. La otra posibilidad en el entorno Windows es inclinarse por un Athlon de AMD, que acaban de bajar de precio.
Los portátiles para universitarios y profesionales liberales cuestan entre 1.500 y 2.000 euros y llevan como mínimo pantalla de 14 pulgadas, disco de 20 GB y 256 MB de memoria tipo DDR. La grabadora de CD y lector de DVD combinado también se pone más de serie en esta temporada, así como módem y módem de red. Pisará fuerte la pantalla de 15 pulgadas, pese al aumento de peso y consumo.
Respecto al dilema de un portátil con procesador de sobremesa o específico, José Vicente Molera, gerente de Infinity Systems, asegura que el problema se reduce a si se quiere el máximo de prestaciones con 3 kilos o un equipo de 2,5 kilos con menos de prestaciones.
El modelo de menos de dos kilos continúa siendo mucho más caro por el coste adicional de los componentes y, además, se sacrifica tamaño de pantalla y más prestaciones.
La conexión a la red inalámbrica desde el portátil continúa siendo opcional en los modelos domésticos; pero ya es frecuente en portátiles ver la antena integrada en la tapa y un hueco en la parte inferior para colocar una tarjeta de red inalámbrica o Bluetooth.
En sobremesa, la variedad de configuraciones es más elevada que en portátiles, aunque los precios de los más demandados oscilan entre 800 y 1.200 euros, con IVA, sistema operativo y complementos incluidos; a veces con escáner y la impresora de regalo, sobre todo en la vuelta al colegio.
Los dos gigahercios o más se han impuesto como norma en el ordenador de sobremesa, porque incluso los procesadores Celeron o Duron, sin mucha aceptación, se acercan a esta frecuencia. El Pentium III ha desaparecido. Lo que más se va a llevar es el Pentium 4 de 0,13 micras, con 512 K de memoria de segundo nivel y bus de conexión con la placa base de 400 o 533 MHz. AMD coloca en sus Athlon, 384 KB de memoria y bus de 266 MHz.
La memoria RAM es del tipo DDR, preparada para soportar comunicaciones con el procesador de hasta 533 MHz. La capacidad mínima que se lleva es de 128 MB, aunque la mayoría de configuraciones vienen con 256 MB o incluso 512 MB de serie. El disco duro mínimo es de 40 GB, con tendencia en semanas al de 60 u 80 GB
En monitores hay dos opciones básicas: de tubo de 17 pulgadas o plano de 15 pulgadas, con un precio adicional de unos 300 euros, aunque Dell ha reducido este mes a la mitad el precio adicional a pagar por el monitor plano.
De todo en todas partes
La fusión de HP y Compaq ha reducido el número de grandes marcas presentes en el mercado español. Como Dell vende sólo directamente, en las tiendas se encuentran principalmente equipos de sobremesa de HP, Fujitsu-Siemens y Packard Bell, a los que cabe añadir los portátiles de Toshiba y Acer. El resto, que representa del 60% al 70% del mercado doméstico, son equipos ensamblados en España. Una diferencia importante respecto a hace un año es que tanto las marcas multinacionales como las españolas se pueden encontrar en las grandes superficies y centros comerciales, tiendas de informática propias o en franquicia y cadenas de tiendas de electrodomésticos. Lo usual era que las grandes marcas se vendieran principalmente en los centros comerciales, y las tiendas pusieran a la venta los equipos ensamblados. En estos momentos, es normal que El Corte Inglés venda portátiles de Infinity y que en las tiendas Jump haya ordenadores Fujitsu Siemens. Otra característica de la moda Otoño 2002 es la presencia de la última tecnología. La gran superficie se seguirá volcando en la venta de ordenadores, pero con ofertas de equipos con configuraciones plenamente vigentes, tanto de sobremesa como portátiles. Philippe Chaplain, responsable de informática doméstica de Fujitsu Siemens, destaca que ha llegado a acuerdos con MediaMark, Carrefour, El Corte Inglés y PC City para suministrarles la última tecnología a buen precio. Todos pretenden hacerse un hueco en el mercado español de informática doméstica. La previsión es que las ventas crezcan este año en unidades y en facturación, pero muy ligeramente. A ello debería contribuir la mayor venta de portátiles, lo que significa más precio y más equipamiento.
